Salimos de la relajación, nos sentamos para una breve meditación y antes de retirarnos de la clase de Yoga compartimos una pequeña lectura que complementa los efectos de la práctica, como estos hermosos y siempre válidos mensajes del Maestro y Poeta Rabindranath Tagore.
“Cuando las cargas de todos los días resultan muy complicadas y difíciles de manejar, es que la persona no ha sabido encontrar un sistema para distribuir y colocar en su sitio el peso a llevar. En realidad, la búsqueda de este sistema es la búsqueda de la unidad, de la síntesis; es nuestro esfuerzo para poner en armonía la compleja heterogeneidad de los elementos exteriores mediante una adaptación interior. Y al procurarlo, advertimos progresivamente que encontrar lo Único es hallar el Todo”.
Luego agregaba: “Tan sublime privilegio descansa en la unidad que es nuestra energía inmutable (siempre que seamos conscientes de ella), y que radica en la verdad de que esa unidad abarca la multiplicidad. Es decir, los hechos son múltiples pero la verdad es una. Así, mientras el grado de inteligencia animal comprende los hechos, el espíritu humano es capaz de captar la verdad y este descubrimiento es un puro goce, una liberación del espíritu, porque la verdad abre un vasto horizonte y nos conduce al infinito; ya que, al englobar todos los hechos, no nos muestra un simple agregado de hechos, sino que los supera y nos indica la realidad infinita.”
Estos mensajes siempre actuales nos ayudan a pensar y a comprender la vida como el camino que es: un camino espiritual en el más profundo sentido, al reiterarnos que se trata de realizar el gran principio único de la unidad presente en todos nosotros, superando nuestros impulsos egoístas que “enturbian la verdadera visión del alma, puesto que sólo conciernen a nuestro mezquino ego. Pero al tomar conciencia de nuestra alma, percibimos al ser interior que, superando nuestro ego, revela sus más hondas afinidades con el Todo”. Namasté.