El juez de Instrucción 1, Marcelo Cardozo, indagará hoy al comisario mayor acusado por una subalterna de haberla acosado, abusado, maltratado en el trabajo y amenazarla de muerte. La citación fue confirmada ayer y esta mañana debería concretarse, confiaron a PRIMERA EDICIÓN fuentes policiales y judiciales.
El funcionario público fue apuntado la semana pasada ante la fiscal de Instrucción 1, Amalia Benedicta Spinnato, como autor de reincidentes episodios de acoso y abuso en el contexto laboral. La presunta víctima y testigos habrían sido coincidentes y contundentes en señalarlo.
La primera reacción desde el Juzgado de Instrucción 1, fue la orden de retirarle el arma reglamentaria al acusado y la prohibición de acercarse y cualquier tipo de intento por contactar a la denunciante.
El escándalo se desató en la cúpula policial cuando el caso tomó trascendencia con las publicaciones exclusivas de este Diario la semana pasada.
Vale recordar que el comisario mayor fue apartado de sus funciones y puesto a disposición de la Justicia. Se lo investiga, presuntamente, por haber abusado sexualmente de una subcomisario de 32 años que estaba bajo su cargo y función. El funcionario público tiene 54 años y ostentaba el rango mencionado no solo para cumplir con su deber y trabajo directo, también habría obligado a sus víctimas a guardar silencio sobre los episodios reiterados de acoso laboral.
La subcomisario rompió el silencio acompañada por otras camaradas que habrían padecido episodios de menor gravedad pero que sustentarían el contexto de violencia sexual y laboral.
La presentación judicial derivó rápidamente en la decisión de pasar a disponibilidad al sospechoso que cumplía su trabajo en el edificio de la Dirección General de Seguridad frente a la costanera sur en inmediaciones al complejo habitacional A3-2 y el barrio Santa Cecilia de Posadas.
Una suboficial de 38 años también habría sido víctima de amenazas de muerte, por lo que no sólo denunció al comisario mayor de 54 años también detalló la amenaza de quitarle la vida que habría anunciado y repetido.
“Si esa p… va a la prensa y hace pública la denuncia le voy a pegar un tiro, no tengo nada que perder”, fue la amenaza que la víctima dejó asentada en su denuncia en la Fiscalía de la Primera Circunscripción Judicial.
Vale remarcar que, entre pasillos y oficiales de alto rango de la fuerza de seguridad se comentó y ratificó que los actos delictivos similares no fueron pocos pero se mantenían “solapados o silenciados” por la mala aplicación de la verticalidad del funcionamiento institucional.
Medidas internas
Otras fuentes adelantaron a este medio que el lunes, la Jefatura de Policía decidió tomar medidas para aportar claridad y facilitar a los integrantes de la fuerza, principalmente al personal femenino, herramientas para que puedan denunciar y tener acompañamiento para recurrir a la Justicia ante estos casos de violencia.
Se nombraría durante las próximas horas a una mujer y un hombre, ambos con rango de directores, para acudir de inmediato y recoger las denuncias y que se agilicen las acciones legales, dentro de la Policía y en la Justicia.