Con datos precisos de circunstancias y posible botín millonario actuaron los ladrones que irrumpieron el martes por la noche en la vivienda de un comerciante de Campo Ramón y en pocos segundos escaparon con una caja fuerte con 11.500 dólares pero también con joyas y alhajas que superarían ese monto.
Investigadores de la Unidad Regional II intentan dar con los sospechosos del hecho delictivo y posaron entre sus principales sospechas al “Negrito” Ramón Alberto Muñoz, involucrado en varios golpes similares y que tendría activos informantes y colaboradores directos en la zona, remarcaron las voces consultadas por PRIMERA EDICIÓN.
El robo de Campo Ramón fue alertado el martes pasadas las 22, pero los pesquisas estimaron que entre las 19 y 21 se concretó el ingreso al inmueble luego de romper un cerco perimetral y forzar una ventana de aluminio.
Dentro de un armario hallaron la caja de seguridad de 60 centímetros de alto por 40 de ancho. No la violentaron en ese lugar, la tomaron y llevaron sin tocar ningún otro elemento suntuoso o de precio alto.
Los ladrones desaparecieron con los dólares, joyas y documentos y hasta anoche sólo las coincidencias con las maniobras habituales de Muñoz se barajaban entre investigadores. No obstante se intentan determinar el rumbo de varios vehículos vistos rondar por la zona horas previas y que habrían sido registrados por cámaras de seguridad.
Excarcelados
En diciembre pasado, Muñoz y los dos policías provinciales que fueron detenidos junto a él en Ituzaingó, Corrientes, tres meses antes y tras una persecución y disparos con la policía de la vecina provincia, fueron excarcelados bajo caución en la causa por el millonario atraco modalidad “viuda negra” en Oberá y también a un hombre de 70 años.
Los tres continúan imputados por el juez Pedro Benito Piriz pero en el caso de Muñoz también se le otorgó la libertad supeditada (Juzgado de Instrucción 1 de Posadas) en un expediente por “tentativa de homicidio” en el barrio Néstor Kirchner de Posadas por balear a un familiar de un supuesto cómplice suyo abatido en el asalto frustrado en febrero del mismo año a una fábrica de placas de madera en Dos de Mayo.
Vale recordar que durante 2022 no se presentó, en tres ocasiones, a las citaciones para ser juzgado en el Tribunal Penal 2 de Posadas por el asalto a un constructor en junio de 2015 a quien le dispararon y dejaron discapacitado. Está acusado por “robo calificado y lesiones graves”.
Sus antecedentes tienen registros desde 2001 y varían desde romper puertas, sorprender a cuidadores y abrir cajas fuertes y escapar con millonarios botines a utilizar jóvenes que dopan a sus víctimas o utilizan ardides para mantenerlos alejados de sus inmuebles mientras les vacían las cajas fuertes.
Una de estas sospechas lo vincularía, también en 2022 (marzo) , por la sustracción de 4 millones de pesos a un empresario del barrio Villalonga de Garupá.