El brote de rabia paresiante en Puerto Iguazú alerta a toda la zona productiva y a la población por la posible propagación o afección a humanos. Este miércoles, el medio La Voz de Cataratas informó que existen dos nuevos casos sospechosos y bajo investigación.
Se trata de dos animales de la zona de las 2.000 Hectáreas en la localidad que murieron de forma sospechosa y según cuentan, tuvieron sintomatología que encuadra con la enfermedad.
Tal como explicó, Gabriel Russo, jefe del Programa Nacional de Rabia Paresiante del SENASA, en FM 89.3 Santa María de las Misiones días atrás: “Hay que recordar que primero hay un diagnóstico presuntivo, que es el diagnóstico que el veterinario realiza en el campo, y luego el diagnostico por laboratorio, el cual confirma o descarta la enfermedad”.
Asimismo, el medio iguazuense expuso que desde la Dirección de Zoonosis siguen trabajando en operativos de vacunación en animales de la zona y cercanos a los que murieron, como así también a animales domésticos. Sobre esto último, solicitan a los vecinos que se acerquen para vacunar gratuitamente a perros y gatos que puedan ser afectados.
Debido al amplio terreno, la cantidad de animales y la dificultad para acceder a algunos espacios donde se produjo el brote, piden la participación de voluntarios para efectuar la vacunación. “Esto no es solo salud animal, sino también es salud pública”, comentó Marina Ramos, responsable de Zoonosis Municipal.
La rabia es un virus que además de afectar a los animales, puede atacar al humano y causar la muerte. La situación pone en alerta a los organismos de control, debido a la dificultad del accionar para erradicar a los murciélagos vampiros que propagan la enfermedad.
En referencia a esto último, Gabriel Russo explicó: “No teníamos casos desde hace un período interepidémico bastante largo. ¿Qué quiere decir período interepidémico? Es la distancia que hay en tiempo entre un brote y otro. Cuando mayor tiempo hay entre un brote y otro, mayor es la recomposición de la población de vampiros“.
“Una vez que entra la enfermedad en el lugar, esos animales van a ir contagiando de una colonia a otra la rabia; y nosotros la vemos manifestada en los herbívoros, a medida que la enfermedad avanza, también avanza la mortandad de los vampiros, hasta que llega un momento de la enfermedad, independientemente que se vacune o no, va a ceder, porque la población de vampiros va a estar pode debajo de ese umbral de contagios“, destacó a PRIMERA EDICIÓN.