Una frase muy popular en el fútbol indica que los partidos se ganan con goles y no con merecimientos. Cuando Crucero del Norte tuvo todo para liquidar el partido ante Sol de América, en Formosa, un gol en el último minuto de adición le quitó más que una victoria que merecía.
Fue 1-1 ante el conjunto solense y muy doloroso, por cierto, ya que no solo lo deja con un trago amargo cuando tenía prácticamente el triunfo el bolsillo, sino que le quitó le posibilidad de escapar de zona de descenso aprovechando el empate entre 9 de Julio y Gimnasia y Tiro de Salta.
En líneas generales, fue un buen partido del conjunto misionero, quizás de lo mejor que se vio en los últimos partidos. Pero lastimosamente queda opacado por un resultado inesperado si se quiere.
Lautaro Soto abrió la cuenta a los 17′ de la segunda mitad, con un cabezazo cruzado. Y sobre el final, cuando ya se jugaba tiempo extra, tuvo al menos dos chances para sentenciar la historia y perdonó, algo que no lo hizo el local, pues en la última pelota del partido, a los 51′, Ángel Ibarra sentenció el empate con un frentazo.
Crucero se regresa a Misiones con un sabor amargo en la boca, pero no tiene mucho tiempo para lamentos ya que volverá a jugar en pocos días. El miércoles recibirá a 9 de Julio de Rafaela, en un partido clave por la zona de descenso.