Anclado en múltiples razones, la cotización del dólar blue cerró la semana a 574 pesos y siguió en zona de récord. La moneda revirtió la baja inicial y al cierre del viernes avanzó cuatro pesos respecto del jueves. En lo muy poco que va del mes aumentó 24 pesos y durante el año acumula un ascenso de 228 pesos, es decir 65,9%.
Las causas, como se advierte al principio de esta columna, son múltiples. Van desde una inflación cercana al 115% interanual que erosiona el valor de la moneda local y genera una mayor demanda de dólares como refugio. También obedece a una tasa de interés casi neutra o negativa que no disuade al inversor. Cuenta también como causa la especulación que grandes actores financieros desarrollan sobre el blue.
Pero quizás la razón más evidente en lo que va del mes es que, justamente, agosto es el de las elecciones Primarias y la situación política previa está dominada por la incertidumbre política y la percepción de inestabilidad.
La confianza, tanto la de los inversores como la de la sociedad, influye mucho y hoy genera volatilidad en el mercado cambiario.
Hace una semana creíamos que el dólar paralelo podría alcanzar el umbral de los 600 pesos a fines de este mes, o incluso superarlo en función del resultado electoral.
Hoy, a la luz de todo lo expresado, cabe la fuerte duda de si no se acercará a ese precio la próxima semana.