El culto al Santo de la Buena Muerte, aunque no tiene “días canónicos”, en el mundo se lo coloca en fechas como Viernes Santo o el Día de los Fieles Difuntos (o Día de los Muertos). Sin embargo, en Argentina -y en forma especial en el Litoral- se lo venera entre el 13 y el 15 de agosto.
En Misiones, desde hace casi medio siglo, el día elegido es el 13 de agosto.
San La Muerte es un santo pagano de origen guaraní. Se lo conoce también como “Señor de la Buena Muerte” y “Señor La Muerte”.
Se lo representa como un esqueleto de pie, con una guadaña en la mano, y se cree que centraliza el poder de todos los muertos.
Se le puede pedir lo que sea, pero especialmente escucha los ruegos sobre amores, trabajo o hallar cosas perdidas. También es capaz de destruir al enemigo de quien lo invoca.
Sus devotos lo jerarquizan como el más poderoso de todo el santoral profano regional argentino.
Su culto se extiende desde América central a Paraguay, Argentina (principalmente en las provincias de Corrientes, Misiones, Chaco y Formosa) y el sur de Brasil (Paraná, Santa Catarina, Río Grande del Sur). Desde la década de 1960, debido a las migraciones internas, el culto se extendió a ciertas zonas de Santa Fe, Buenos Aires y Jujuy.