Un naranjo es uno de los árboles frutales que no pueden faltar en casa, ya sea en la huerta o en el jardín. Se trata de un cultivo cítrico muy popular, uno de los más conocidos después del mandarino y el limonero.
Contar con un árbol de naranja no tiene precio. Teniendo éxito en la siembra y el proceso de crecimiento de la planta, puedes contar con el fruto, la naranja, que puedes emplear en la cocina de casa, ya sea para jugos, para consumir como fruta o realizar otras recetas.
La verdad es que sembrar y ver crecer un árbol de naranjo puede ser muy sencillo, el secreto del éxito está en darle los cuidados básicos que todo cultivo debe de tener.
Otro punto a tener en cuenta es que se trata de una planta que puede tardar en crecer, pero una vez que la veas desarrollarse cada temporada, no te vas a arrepentir.
Aquí te enseñamos cómo tener este árbol frutal en casa, y en una maceta:
Para comenzar el proceso, vamos a separar los elementos necesarios:
- Una maceta grande
- Tierra abonada
- Mantillo
- 6 semillas de naranja
Una vez que contemos con todo lo necesario, vamos a llenar la maceta (resistente y amplia) con la tierra abonada y sustrato a tres cuartos de su capacidad y realizar aproximadamente tres orificios con 3 centímetros de profundidad y una distancia de cuatro centímetros entre sí.
Una vez que hayamos preparado la maceta, vamos a colocar las 6 semillas, dos por cada hoyo, y cubrimos con sustrato. Una vez plantadas las semillas, realizamos un riego cuidadoso con un poco de agua.
Lo que tendrás que tener muy en cuenta es que a partir del momento del sembrado, debes de exponer el cultivo a los rayos indirectos del sol, tener paciencia y llevar a cabo los cuidados básicos que necesita para poder crecer.
Cuidados del naranjo
Ya que el naranjo es una especie subtropical, tendremos que cuidarlo de los últimos fríos del invierno, incluso, en las noches frías de primavera, ya que suelen haber heladas tardías y aquello podría complicar el desarrollo de la planta. La temporada ideal para este cultivo es el calor de la primavera y verano.
La planta de naranja precisa de mucha luz y temperaturas cálidas para dar frutos, pero también es importante que la planta se desarrolle en un ambiente húmedo. De todas maneras te recomendamos regarlo solo cuando notes la tierra seca, porque el exceso de agua puede echar a perder sus raíces.
Si quieres lograr un árbol sano y fuerte, tendrás que aportar a la tierra un fertilizante o sustrato para cítricos y así poder tener pronto ese árbol de naranjo dentro del huerto en casa que seguramente dará grandes frutos.