El 9 de noviembre de 1976 en una asamblea general de vecinos realizada en el local de la Asociación de Maestros de Montecarlo, nació la entidad llamada Asociación Promotora de Turismo y Cultura de Montecarlo, siendo uno de sus objetivos promover intereses turísticos y culturales. Su primera comisión directiva estaba integrada por: presidente, Luis Henn; secretario, Jesús Armando Castro; tesorero, Klaus Ranger (falleció este año); primer vocal, Juan Plocher; segundo vocal, Lucio Bosse (fallecido) y los vocales suplentes: Günther Baacke y Pedro Langhans (fallecido).
En los primeros años una de las metas principales era la realización de exposiciones agroindustriales, para mostrar el potencial de la zona, pero sin descuidar los aspectos culturales. Así, se realizó con gran suceso las Expo 1977, la FERIRAMA 1978 y la Expo 1980. Con parte del beneficio de la Expo 77 se adquirieron 25.305 metros cuadrados de la familia de Juan Vortisch, en cuyo terreno había una gran cantidad de árboles nativos y exóticos.
En octubre de 1982 esta entidad organizó la primera exposición de la Fiesta Provincial de la Flor, en la que se vendieron 7.603 entradas y donde tuvieron una activa participación vecinos de Montecarlo y de la provincia.
En el año 1991 se agregó la primera Fiesta Nacional de la Orquídea, conjuntamente con la octava Fiesta Provincial de la Flor.
Viendo una circular de la comisión directiva de la Asociación Promotora de Turismo en la que se observaba que se realizaba una positiva Fiesta de la Flor, pero que no había flores en las veredas y casas de Montecarlo, pero, por otro lado, muchos terrenos baldíos con malezas. A raíz de ello el vecino odontólogo Juan Plocher redactó quince normas para una comisión de vecinos. El 31 de agosto de 1990 se conforma el primer jurado con los siguientes vecinos: Cristina Fink, por Radio Horizonte; Julieta Chiamas de Wiedemann, por LT18 radio Eldorado y el diario El Territorio; Azucena González, por la Municipalidad; Norma González, Elsa Neuberger de Machado, Teresa Gandolfo de Laxague y Juan Plocher, que fue su presidente durante los primeros años. No hubo donde respaldarse para las distintas observaciones, tal es así que se quería premiar a los mejores jardines parques y veredas. Al hacer los primeros recorridos se constató que había que separar los jardines y parques, y un tercero eran las veredas. En el primer año 1990 el jurado pudo observar 55 posibles candidatos en todo Montecarlo, los que se fueron multiplicando en forma vertiginosa en los siguientes años. Por ejemplo, en 1992, había en Montecarlo 400 candidatos para elección de los mejores jardines, parques y veredas con plantas y flores, lo que demostró que los vecinos querían lucirse en el pueblo y ante los visitantes. El jurado tuvo que realizar un arduo trabajo. Siempre los premios y reconocimientos se entregaban antes de la fiesta central en el predio del parque Vortisch.

En el año 1992 el jurado resolvió incluir en las premiaciones a la mejor orquídea domiciliaria en exhibición. Se descubrió que en un árbol de naranjo seco de la propiedad de “Pupa” y Manfredo Lorenz -calle Mitre casi avenida El Libertador-, había una gran planta de la especie exótica “dendrobium nobile” conocida popularmente como “ojo de muñeca” con unas dos mil flores. Se tomaron fotografías que salieron publicadas en el diario en septiembre 1992. Se produjo un verdadero boom. Los vecinos querían tenerla en sus casas por la facilidad con la que crecía y se adaptaban fácilmente al adherirlas a los gajos de las distintas especies de árboles. Con ella todos aprendimos. Esa especie exótica originaria de Asia se desparramó por todos los rincones de Montecarlo y la adorna en agosto y septiembre, también se difundió por toda Misiones y los países vecinos de Brasil y Paraguay.
Desde los comienzos el jurado pudo observar excelentes jardines como el del matrimonio de Dora Schwarz y Ulando Waidelich, sobre calle Belgrano. Ellos obtuvieron el primer premio en Jardín durante varios años consecutivos. Lo más positivo que el jurado tuvo al poco tiempo de visitar los espacios verdes en los distintos barrios, donde muchas veces realizaban un trabajo conjunto el matrimonio o toda la familia. En 1993 con la décima Fiesta Provincial de la Flor se organiza en Montecarlo la Primera Fiesta Nacional de la Orquídea.
Una idea que continúa
Durante este año, a pesar de jornadas de mucho calor, el jurado recorrió constantemente todos los barrios durante los distintos meses, quedando muchas veces sorprendido de las variadas bellezas florales, pero tenía que decidirse conversando con los distintos dueños, para tener una justa clasificación. Los premios quedaron así distribuidos:
Jardín: primer premio, Rancho alegre, de Elene Keller- Martín Sanabria, situado en el barrio Martín Fierro. Segundo premio: Noni Scherer de Berger, en el barrio Horizonte. Tercer premio, Nélida Szrank, en el barrio Gendarmería.
Parques: Primer premio: Celia y Carlos Weyreuter, en el barrio Industrial. Segundo premio, Rosana Walter, en calle 4 de mayo y C. Naujorks. Tercer premio: Elsa Godoy-Alderete.
Orquídeas en exhibición: Primer premio, Margarita Schwartz-Herminio Díaz, en calle Uruguay. Segundo premio: Lidia Kraus, en el barrio Martín Fierro. Tercer premio: Pauline Bauer-Bopp, en la calle Julieta Wiedemann.
Los reconocimientos se entregaron en el salón de los Bomberos voluntarios situado en el Parque Vortisch el domingo 8 de octubre con la presencia de un muy numeroso público, con premios para todos.

“Haciendo una mirada hacia atrás en estos más de 30 años de distinciones son cientos de vecinos que cada año, muchas veces con toda familia, adornan todo su entorno familiar. Pero los distintos integrantes de Jurados trabajaron sin percibir nada. Todos ellos merecen el aplauso de toda la comunidad de esta localidad del Alto Paraná”, manifestó Juan Plocher idealizador del Jurado Jardines y Parques de Montecarlo.
Explicó que cuando se comenzó con esta idea de premiar a los mejores jardines, parques, veredas, en adhesión a la Fiesta de la Flor y de la Orquídea, “no había un antecedente de algún lugar del que podíamos copiar el reglamento. Tal es así que, en la primera premiación, puse entre los quince artículos del reglamento, premiar a veredas y jardines-parques. Y resulta que al poco tiempo nos dimos cuenta que había que separar a jardines de los parques. Sobre la marcha empezamos a cambiar ideas. No es lo mismo premiar a una vereda con lindas flores, pero tiene que permitir el paso. También en eso se presentaron situaciones de ese tipo”.

Después, “se premió los mejores negocios con flores en exhibición en sus vidrieras. Cuando apareció el tema de las orquídeas, apareció el cuestionamiento de porqué se elegía a una sola flor para la fiesta nacional, fue aceptado y creo que fue justo. Así también en los jardines cada uno tiene su gusto”, añadió.
Plocher comentó que, en el acto de entrega de las distinciones, a las que asistieron muchos vecinos de la ciudad, la presidente Lilian San José empezó su introducción con palabras del poeta y médico argentino Baldomero Fernández Moreno:
70 balcones hay en esta casa,
70 balcones y ninguna flor,
A sus habitantes, señor, que les pasa. Odian el perfume…. odian el color? A mí me encanta, y es para que piensen los que no tienen, aunque sea, una plantita en su casa”.
Por Juan Plocher