La Biofábrica Misiones cierra el año con un balance positivo en la producción de cannabis medicinal. Recordemos que la empresa pública-privada desarrolla diferentes productos derivados del cannabis, el cual siembra y cultiva en el predio ubicado en Posadas.
Juan Serventi, subgerente de la entidad, en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, sostuvo que lo hecho durante este 2023 fue bueno.
“La verdad es que el balance va a cerrar bien, va a cerrar positivo. Esta semana arrancamos la cosecha de la producción a campo, que es la que nos asegura lo que es producción a escala de flores, para la posterior producción de aceite. Siempre hay cosas para mejorar, pero realmente año tras año, o cosecha tras cosecha, venimos afinando la estrategia de manejo, la estrategia nutricional, la estrategia contra plagas, enfermedades, así que realmente estamos muy contentos por lo que venimos viendo en la cosecha que arrancó esta semana”.
Además dijo que a fin de mes ya tendríamos que estar cosechando la mitad de lo que es la producción a campo, que es una hectárea con los dos invernaderos también, lo que “el año pasado en esta misma época no pudimos hacer por un tema de tiempos de la preparación del suelo, pero este año ya con la tierra preparada, se pudo plantar en tiempo y forma las dos hectáreas estas primeras, así que calculo que a fin de mes estaremos cosechando casi toda la producción”.
Al ser consultado acerca de cuándo se cosecha, Serventi manifestó que hay dos etapas bien diferenciadas, una es la vegetativa y la otra es la floración. Según el ambiente la etapa vegetativa varía para generar un porte de planta totalmente distinto, a campo es una planta más grande, para asegurar la producción y asegurar la resistencia al clima, al calor, al viento. Una vez que pasa a campo automáticamente se induce a floración y ahí -depende la variedad- son ocho semanas, dos meses. A la octava semana ya se empiezan a monitorear los tricomas que es donde está el aceite y según su coloración se procede a la cosecha”.
Para tener en cuenta, los tricomas son pequeñas prolongaciones de la planta repartidas por todo el tejido externo con diversas formas y que definen el aroma, sabor y la cantidad de cannabinoides y terpenos que tendrá el ejemplar.
Serventi sostuvo que la entidad no tuvo ningún rechazo en cuanto a sus productos: “venimos haciendo las cosas prolijas, constantes y asegurando una buena producción de materia prima”.
En cuanto al cultivo particular, Serventi remarcó que la producción de aceite de cannabis solamente la puede efectuar la Biofábrica, porque así lo marca la legislación, sin embargo comentó que “la gente puede producir bajo una licencia del REPROCAN que permite tener a las personas, previo un diagnóstico médico, nueve plantas florando, pero para uso propio. La producción de aceite, la única habilitada es la Biofábrica”.
Sobre esto último, sostuvo que aún es complicado que la sociedad pueda sumarse a la cadena productiva debido a que primero debe haber una trazabilidad de los procesos que deben cumplirse.
Actualmente la Biofábrica trabaja en la producción de aceites medicinales, como así también la propuesta de una crema con CBD y en un proyecto para reutilizar los residuos de la planta.
Sobre la introducción del cannabis al Código Alimentario destacó que “siempre que se abra el panorama, que se aclare la legislación, es positivo. El cáñamo, o el cannabis, como alimento esté en el código alimentario es una ventana a nuevas unidades productivas. Nosotros lo vemos positivo, hay que trabajarlo, hay que ver cómo meterlo en el esquema productivo de la Biofábrica, pero siempre es positivo tener reglas claras para poder producir”.
Por último destacó el rol de la provincia en esto, y la ubicó en el “top 3” en relación al resto del país resaltando la cadena productiva de la entidad. “Realmente es un valor agregado que tiene la provincia”.