El monumento en honor y recuerdo a Andresito Guacurarí, ubicado en el extremo sur de la Costanera de Corrientes, colapsó como consecuencia de las intensas ráfagas de viento registradas durante la madrugada y primeras horas de la mañana de este sábado.
La escultura de más de 17 metros de altura y 15 toneladas, ya presentaba una inclinación desde finales de octubre del año pasado tras un fuerte temporal, por lo que la caída del monumento no resulta sorprendente. Es importante señalar que, en los últimos años, la obra no había recibido ningún tipo de mantenimiento ni reparación.
Afortunadamente, no se reportaron personas lesionadas en el incidente, solamente la pérdida de una pieza cultural, artística e histórica.
Según detallaron, el óxido propio del material con el que está hecho generó un quiebre en uno de sus tres parantes principales y más los fuertes vientos de las últimas semanas la escultura había terminado inclinada hacia la derecha hasta que finalmente cayó.
Así se encontraba antes del derrumbe:
Fuente: El Litoral – Diario Época