Más de 35 mil misioneros, sobre todo niños y adultos mayores, que dependen de los comedores comunitarios para alimentarse a diario, desde diciembre están totalmente desprotegidos en el sentido de que perdieron la copa de leche o el plato de comida a raíz del recorte que implementó el nuevo Ministerio de Capital Humano de la Nación.
Cada mes del año pasado, según datos obtenidos del ex Ministerio de Desarrollo Social, durante 2023 llegaban alrededor de 500 mil kilos mensuales de mercadería. En los últimos dos meses fue cero kilo. Se agrava la seguridad alimentaria de miles de niños, no solo en Misiones, en otras provincias también.
En la mayoría, los que asisten a estos espacios, son hijos de madres solteras o familias en situación de vulnerabilidad económica, con sus padres sin trabajo o realizando tareas informales, con bajo o nulo nivel de estudio y residiendo en asentamientos populares irregulares.
a situación se volvió tan grave en los barrios populares de todo el país que hasta la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió el pasado lunes que “cientos de miles de familias” en el país tienen problemas para “alimentarse bien” y afirmó que “la comida no puede ser una variable de ajuste”, por lo que los comedores comunitarios, entre otras instituciones sociales y religiosas, deben recibir asistencia “sin dilación” para que la situación “no profundice la crisis alimentaria”.
La asistencia llegaba desde Nación a los comedores y merenderos que administran las organizaciones sociales en los barrios. Cada mes se les entregaba una acordada cantidad de kilos de mercadería. No se les entregaba dinero. La última vez que recibieron fue en noviembre.
A raíz de esto, el jueves hubo movilizaciones en todo el país para reclamar que la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, reactive el reparto ya que no dio explicaciones ni atendió a los referentes de las organizaciones.
En Misiones funcionan, por lo menos, 350 comedores o merenderos que reciben mercadería de la Nación y asisten diariamente a más de 35 mil personas, según datos extraoficiales. Esto sin contar la asistencia que brinda la Provincia a través del Ministerio de Desarrollo Social y los municipios.
En la marcha del jueves denunciaron que el presupuesto ejecutado por Pettovello en enero fue cero pesos. Es decir que no usó nada del dinero destinado a las personas más necesitadas.
Recorte a organizaciones
La ministra se mostró firmando acuerdos en la semana con Cáritas y con iglesias evangélicas y trascendieron versiones de que buscaría recortar el manejo de las organizaciones para fortalecer el de las iglesias. Pero mientras tanto la gente pasa hambre. Cuanto más se demore, mayor será el problema.
Aníbal “Tato” Zeretzki, docente y dirigente del Polo Obrero, explicó a PRIMERA EDICIÓN que “la última vez que recibimos fue en noviembre. Se iba a recibir en diciembre, después del 10, pero con el cambio de Gobierno no hemos recibido más”. Señaló que “tenemos 96 merenderos en Misiones que atienden a 5.096 niños y niñas”.
En tanto, Martín Sereno, del Movimiento Evita y la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular) señaló que cuentan con “170 espacios donde se provee a 11.000 asistentes”. Y aclaró que “eso es lo registrado pero calculamos que el último mes se sumó un 30% más”. El incremento responde, claramente, a la inflación y el encarecimiento del costo de vida.
La organización Libres del Sur organizó una movilización de cocineras de comedores populares con carteles de protesta, entre otras actividades. Comedores y merenderos de Garupá, Posadas y Oberá se sumaron al reclamo de insumos. Entre las organizaciones que se plegaron al reclamo del jueves, en todo el país, se encuentran la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTAA), Libres del Sur, el Movimiento Argentina Rebelde, el Frente Popular Darío Santillán (FPDS), la Coordinadora por el Cambio Social; el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL); el FPDS-Corriente Plurinacional y el Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social (MULCS), entre otras.