Todos coincidimos en que el ser humano proviene de una mamá y de un papá. En biodecodificación la lateralidad es muy importante pues a través de ella podemos ver la relación con cada uno de los progenitores. El lado izquierdo determina en los dolores con la materna y en el derecho con la paterna.
Así hoy podemos decir que nuestro lado derecho es el que está más activo al celebrar el Día del Padre, pues su figura influye y es determinante en muchos aspectos para el hijo como por ejemplo es el que genera confianza, seguridad, interviene en la autoestima y nos lleva a los seres humanos a las relaciones sociales.
Nuestros padres, ambos, reflejan nuestra comunicación con el inconsciente: el padre como figura de poder muestra la comunicación exterior, la forma en que interactuamos con y a través del universo fuera de nosotros.
De allí la importancia del papá en la vida de los seres humanos, contar con una figura paterna es fundamental para un crecimiento saludable, siempre y cuando esa relación sea la óptima, claro está.
En este día tan especial hablaremos desde la energía masculina, para profundizar esta celebración y darle ese contenido científico y metafísico a lo que nos da origen como ser vivo.
El padre y el mundo
Papá es el que abre las puertas al mundo, es quien representa esa conexión con los demás. Se trata de una figura completa y presente, que puede ser representada por un varón de la familia en caso que el padre esté ausente y no es la supuesta “madre-padre”, no es así. Eso no existe para el desarrollo real del niño.
Desde los 4 años aproximadamente comenzamos a “detectar” a ese “otro” en nuestra vida. Ese que es padre y es quien nos dará la seguridad emocional para salir al mundo. Descubrir que hay una figura masculina para darle la mano y que nos lleve a las relaciones. Lo veremos relacionarse, comportarse e imitaremos sus reacciones.
La figura del padre es como ese puente entre la familia y la sociedad, por eso también hablamos de su relación con la familia.
Aunque mire el fútbol
Dulce María Pérez Torres, catedrática e investigadora, afirma: “El Día del Padre es un momento especial para reflexionar sobre la importancia que ha tenido este personaje que algunas veces está en silencio en casa. En ese silencio también nos representa el mundo en cuanto a la responsabilidad y en cuanto al compromiso social, porque quiere lo mejor para su gente, aunque esté mirando el fútbol o entretenido en algo. La gente puede rescatar más acciones positivas que negativas en el actuar de un padre de familia con sus seres queridos”.
Autoridad y ayuda
En la fuente básica que acompaña la tecnología, Wikipedia, habla de los padres de familia que simbólicamente son el mayor aporte económico, algo que actualmente está cambiando, pero en la simbología todavía se mantiene en el generacional.
El hombre tiene esa visión de ayudar y apoyar más en la parte económica, es alguien con poder o autoridad, con quien uno puede identificarse a un nivel profundamente psicológico y que genera emociones generalmente sentidas hacia el propio padre.
Y veremos que en el Diccionario Internacional de Psicología se define “figura paterna” como “nn hombre a quien una persona admira y a quien trata como un padre”.
Para las constelaciones familiares
El padre de las constelaciones familiares, Bert Hellinger afirma: eres 50% de mamá y de 50% papá, energía femenina y energía masculina. La autoridad, firmeza, decisión. De él tomas la fuerza para conseguir tus objetivos, te permiten poner límites.
Ayudan a saber de dónde vienes y enfocarte a dónde vas. Ofrece usar tus capacidades a todos los niveles. La posibilidad de tomar la energía del mundo, que te hace ir hacia fuera. Concretar proyectos, salir del nido, avanzar en tu vida.
Enfocarte en la parte más social y laboral. La ayuda para tener un pensamiento lógico, lineal y matemático. La determinación a empezar nuevas relaciones, emigrar, cambiar de trabajo para prosperar.
Todo eso es el papá, así que vale este día de celebración.
Sanando heridas
Hoy un papá celebra su día y también puede ser un hijo con una herida y es un buen momento para sanar. Hoy todos los seres humanos tendríamos que celebrar este día por la vida misma que nos dio nuestro progenitor. La biología es sabia y venimos de la unión de dos células: una de papá y otra de mamá. Indiscutible.
Si te enojas con tu padre, lo rechazas o lo excluyes estás rechazando a una la mitad tuya. No tomar (reconocerlo) al padre hace que mirar hacia tu futuro y avanzar sea muy complicado. Por eso, cuando una madre impide que un hijo tome a su padre, le está negando el éxito social, le quita fuerza, le crea una personalidad llena de estrés y hace que pierda el equilibrio interno de las dos partes.
Rechazar o excluir al padre hace que te quedes atascado en esa energía de lucha.
Tomar al padre es asentir tal y como es, con sus luces y sus sombras. Haciendo eso consigues la paz y puedes cambiar lo que no te gusta de ti.
Tomar a tu padre te permite hacer tu vida de la mejor manera, tomando tu responsabilidad y hacer por ti lo que hasta ahora le has exigido a él.
Beneficios de tomar al padre
- Consigues más claridad mental.
- Tienes la capacidad de poner y ponerte límites.
- Posees la fuerza para tomar decisiones.
- Te aporta la capacidad de sentirte en paz contigo.
- Te da la facultad para empezar negocios.
- Obtienes más fuerza para afrontar tus objetivos.
- Avanzas hacia la adultez.
- Afianzas relaciones.
- Viajas y conoces otras partes del mundo.
- Encuentras tu proyección social.
- Trabajas en lo que te gusta.
- Plasmas la creatividad de lo femenino con claridad y fuerza.
Tomando la energía del padre de Bert Hellinger: Hoy reconozco, acepto, reconcilio e integro en mí la energía masculina de mi padre y la energía femenina de mi madre, sin juzgarlos, entendiendo que cada uno de ellos hizo su mayor esfuerzo según el nivel de consciencia en el que transitaban.
Y así con infinito amor y gratitud tomo la única vida que tengo y me hago cargo de mí mismo.
Agradezco la bendición de tener el padre que tengo y rompo el patrón de dolor y sufrimiento. Recibo a papá en mi corazón, siento su presencia protectora y avanzar con paso firme porque sé que no estoy solo. Hoy me reconcilio con mi padre.
Suelta el rencor, la culpa y deja que fluya poco a poco de nuevo el amor.
La psicóloga Lola de Miguel dice que el papá representa:
Desde el punto de vista astrológico el padre es el Sol, en el Tarot es el Emperador, en la mitología es Zeus, y representa nuestra energía Yang.
Nuestra conexión más inmediata con el mundo real, lo material, lo práctico, lo que podemos tocar.
Recibir la energía del mundo exterior, esa que se necesita para ir hacia afuera, con pasos firmes y seguro.
Enfocarse hacia el logro de los objetivos que me he trazado en la vida.
Rige los órganos del lado derecho de nuestro cuerpo y el hemisferio izquierdo encargado de la lógica y el aprendizaje formal.
La acción, determinación, voluntad, poder y reconocimiento.
Marca nuestra relación con la profesión, los estudios, el rumbo que tomemos, nuestras acciones.
Otorga libertad, identidad y autonomía psíquica para individualizarse y realizarnos como personas.
Representa el éxito y la profesión.
Su energía ayuda a poner límites con firmeza y determinación en todos los ámbitos de mi vida.
La buena relación con el padre es necesaria para posicionarnos en la vida. Por eso, cuando tenemos problemas para reconocer nuestro valor o nos cuesta empoderarnos, asumir las riendas de nuestra vida, o lograr el éxito, es hora de reconciliarnos con él.
Si notas que alguna de estas áreas de tu vida está estancada, es hora de sanar la relación con tu padre, esté vivo o no, lo hayas conocido o apenas lo recuerdes, lo tengas cerca o en la distancia.
Deja que tu alma converse con la suya.
Por todo lo expresado y por todo lo que se puede saber al autoobservarnos vale un gena: ¡Feliz Día del Padre!
Por Rosanna Toraglio
Periodista de
Primera Edición