En los últimos días algunas frutas y verduras de consumo masivo que se venden en el Mercado Central de Misiones (MCM) experimentan fluctuaciones con subas importantes de 100% debido a una combinación de factores climáticos y económicos adversos.
El invierno extremo que se está viviendo en todo el país está causando un severo impacto en los cultivos, pero además la reciente disparada del dólar que influye en los precios de importación, como el de la banana que se trae de Brasil y que no ingresa al MCM desde principios de este mes, así como de la cebolla, que había bajado (la bolsa se conseguía a $11.000), pero volvió a subir al doble (actualmente cotiza a $20 mil).
“La cebolla y la banana, dos alimentos básicos en la dieta diaria de muchas familias, están mostrando una notable escasez en el mercado. La cebolla, afectada por condiciones climáticas adversas que redujeron la producción en el sudoeste del país, llevó sus valores al doble. Este incremento se agrava con la suba del dólar, que ha encarecido aún más los costos de producción y del flete de esta hortaliza esencial, que no se produce en Misiones”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el operador Fabián Florentín, al frente de la firma Don Mario SRL, mayor referente del Mercado Central.
“No obstante, aunque actualmente la cebolla argentina está cara, se espera que para los primeros días de agosto empiecen a entrar las primeras cebollas brasileñas, esto es debido a que la cebolla argentina está terminado su cosecha y va a escasear un poco hasta que empiece la nueva cosecha”, dijo.
Y aseguró: “Del mismo modo, la banana está siendo severamente impactada por las condiciones climáticas desfavorables en las regiones productoras del vecino país. La reducción en la oferta, también se ve exacerbada por los costos de importación que nos llevó a que entre cara a principios de mes y directamente ahora está faltando”.
Como resultado de lo que explicó Florentín, los consumidores misioneros se enfrentan a una escasez repentina y precios elevados de productos básicos, como los mencionados anteriormente; pero que también afectan a otros como el ajo, que pasó de $18.000 a $28.000 o el cajón de ciruela que arrancó el mes a $25.000 y ahora roza los $40.000.
“Como novedades positivas aparecieron las primeras frutillas a $25.000 la caja de cinco kilos; las sandías de Brasil a $15.000 que tienen un promedio de 9 kilos cada una. A su vez, hay que estar atentos a que con el frío, las hortalizas y verduras pueden modificar su precio, pero hasta el momento no hubo cambios”, amplió.
Consultado sobre el citrus, Florentín destacó que “está favorable por el frío y los precios siguen estables”, además “la mandioca está en su pleno apogeo y el precio está a $5.000 la caja de 20 kilos”. En tanto, la zanahoria modificó su precio a la suba porque se está trayendo menos cantidades desde Mendoza y se encarece el flete.
“La batata está saliendo la de la zona a $5.000 la bolsa, la papa blanca está viniendo de Catamarca y de Mendoza, la negra del Sudeste Argentino (Mar del plata, Balcarce) y más o menos se mantiene”, dijo.
Asimismo, Florentín anticipó que durante estos días de bajas temperaturas, los consumidores y comerciantes por igual deberán estar atentos a cualquier cambio en los precios de productos como tomates, espinacas, zanahorias y otras hortalizas populares. “Tradicionalmente, los períodos de temperaturas más frías suelen afectar la oferta, todavía no está ocurriendo, pero no sabemos qué novedades habrá en los ingresos de la semana próxima, en consecuencia, si llegara a haber una menor producción o un aumento de los costos de transporte y almacenamiento podrían incrementarse los precios” alertó Florentín tras hacer un análisis de cómo se comporta el mercado agrícola.
“Esto es así, cualquier cambio repentino en el clima o en el dólar desencadenan fuertes subas”.