Un empleado de comercio que estaba condenado por chocar violando el máximo de velocidad, el límite de alcohol en sangre y provocarle discapacidad a una joven en 2019, y que fue detenido el pasado viernes 12 de julio por incumplir la prohibición de manejar, ahora fue liberado bajo caución juratoria, señalaron fuentes del caso.
La exención de prisión fue firmada el miércoles 31 de julio último por el juez Correccional y de Menores 2 de Posadas, César Jiménez, beneficiando al infractor apenas 19 días después de ser arrestado y que le revocaran la condena de la prisión en suspenso, indicaron las fuentes.
El individuo, identificado como Arturo David Sosa, de 47 años, fue condenado en noviembre de 2023 por el Juzgado Correccional y de Menores 2 de la Primera Circunscripción Judicial a dos años y seis meses de prisión en suspenso como autor de “lesiones graves por la conducción imprudente de un vehículo automotor, calificada por el estado de ebriedad del autor”, delitos previstos por el artículo 94 Bis, segundo párrafo, del Código Penal Argentino.
Además, la sentencia impuso la inhabilitación a Sosa para volver a conducir durante tres años.
Sin embargo, la orden judicial no fue cumplida y menos de dos meses después que se le notificara al sentenciado los límites, los habría violado de manera flagrante, tal como publicó en su momento y en forma exclusiva PRIMERA EDICIÓN.
La detención
El jueves 13 de junio pasado, a las 11.25 en un control preventivo de seguridad montado por efectivos de la Policía Federal Argentina sobre la ruta nacional 12 en la zona de ingreso y egreso al barrio Itaembé Guazú de Posadas, descubrieron que el conductor que se identificó con una licencia de conducir emitida por la Municipalidad de Candelaria, tenía vigente el impedimento para manejar por la condena a prisión por el siniestro de hace poco más de cinco años en jurisdicción de Garupá.
Sosa fue invitado a descender de su presunta camioneta Toyota Hilux y a comunicarse con un familiar que se haga cargo del transporte y resolver los próximos trámites respectivos con la Dirección de Tránsito de la comuna posadeña. Se le informó a su vez que la situación sería notificada al Juzgado Correccional y de Menores 2 para que determine el paso procesal respecto a la sentencia vigente.
Intervino la fiscal María Laura Álvarez y solicitó la inmediata detención de Arturo David Sosa con la revocatoria pertinente de la prisión en suspenso.
El juez Jiménez acompañó la solicitud y el viernes 12 de julio pasado se ordenó la aprehensión del empleado de comercio para que se ejecute la decisión. No obstante, ahora el magistrado consideró que “no existen motivos para creer que el interesado tratará de eludir la acción de la Justicia o entorpecer sus investigaciones, es posible acordar el beneficio impetrado, bajo caución a establecer”. En este caso fue juratoria.
Secuelas de por vida
Arturo David Sosa, empleado de comercio de una compañía de servicio de telefonía celular, cable e internet le cambiaría la vida para siempre a una joven la madrugada del viernes 25 de enero de 2019 cuando se dirigía hacia su vivienda en el barrio Santa Helena de Garupá.
En ese lugar colisionó a bordo de un Citroën Picasso sobre la avenida Tulo Llamosas (exruta nacional 12) en el cruce con la calle Saltos del Moconá a una pareja de jóvenes en motocicleta. Carlos Ledesma, entonces de 24 años y su compañera Isabel Batista, sufrieron lesiones de diversa gravedad.
A la joven debieron amputarle la mitad de la pierna izquierda, tuvo cortes en el rostro y traumatismos múltiples que le costaron largas semanas de internación y rehabilitación.
Según se supo durante la investigación del hecho, la velocidad en que transitaba Sosa era de 70,53 kilómetros por hora, sobre la exruta 12 cuando colisionó con su automóvil la moto conducida por Ledesma.