El ministro de Salud de la Nación, Mario Russo, presentó a sus pares provinciales en una reunión virtual el Plan Estratégico de Prevención y Control del dengue 2024-2025. Después de la mayor epidemia de dengue registrada en el país, el Gobierno nacional explicitó este jueves las estrategias y acciones que en forma coordinada se llevarán a cabo desde la Nación, provincias y municipios para tratar de evitar un nuevo brote.
Sin dudas, el gran cambio respecto a los planes estratégicos de años anteriores es que el Gobierno nacional garantizó el financiamiento a través del Plan Sumar de las actividades de vigilancia entomológica, capacitación sobre dengue a equipos de salud, consejería en domicilio para prevención y control de dengue, notificación de caso sospechoso de dengue, búsqueda activa de febriles, consulta a efector para seguimiento de caso sospechoso o confirmado de dengue, teleconsulta para seguimiento de caso sospechoso o confirmado de dengue, antígeno NS1, IgM y PCR para dengue, además de la visita domiciliaria al caso sospechoso de dengue para acciones de control vectorial.
Falta la letra chica
Consultado al respecto, el director de Epidemiología, Eduardo Javier Ramírez, indicó a PRIMERA EDICIÓN que “nos interesaba mucho como provincia la discusión de los costos y financiamiento de todo lo que significa el abordaje integral de esta problemática social”.
Según precisó, “la Nación propone un plan de cuatro fases: preparación, alerta temprana, respuesta epidémica y recuperación a través de ocho componentes, entre los que están incluidos como herramientas de financiación al Programa Sumar. De esta manera, adiciona la problemática del dengue a una estrategia de gestión y de financiación de un plan que viene funcionando hace muchos años con trazadores distintos”.
Pese a que en el resumen ejecutivo del Plan Estratégico de Prevención y Control del dengue 2024-2025 menciona el financiamiento por parte de la Nación de los reactivos para el diagnóstico de los pacientes, no ofrece mayores precisiones acerca de cómo se distribuirán estos recursos entre las provincias ni tampoco sobre cuáles serán los criterios de utilización.
“No fueron muy específicos sobre estas cuestiones y tampoco sobre la cooperatividad, la operatividad y ejecutividad de la propuesta”, admitió Ramírez quien recordó que las acciones que hoy se están articulando con la Nación “no quita a las que ya teníamos planificadas y que coinciden con las directivas internacionales y las propuestas por la Nación”.
Componentes
Este plan está estructurado a partir de ocho componentes: coordinación, planificación, financiamiento y monitoreo; vigilancia, investigación epidemiológica integrada y ajustes a medidas de salud pública; vigilancia virológica de las arbovirosis; manejo de casos, organización de servicios de salud, prevención y control de infecciones; vigilancia entomológica y control de vectores; comunicación, participación comunitaria y gestión de la infodemia; prevención por vacunas; y apoyo operacional y logística.
Y en lo que respecta a la atención de los pacientes, se puso en marcha la Red de Referentes Clínicos provinciales y la Guía de Lineamientos para la reorganización de los servicios de salud en situaciones de brotes o epidemias de dengue destinada a garantizar la atención adecuada y oportuna, reducir los tiempos de espera y el manejo de los casos de acuerdo a criterios de gravedad.
Vacunación focalizada
Este año se suma la vacuna contra el dengue como herramienta de prevención. En el caso de Misiones, que hace ocho meses comenzó a vacunar a la población de 20 a 59 años, espera ahora la llegada desde la Nación de dosis para la vacunación de los adolescentes de entre 15 y 19 años. Si bien las autoridades nacionales de Salud anunciaron el reparto de las mismas en agosto, aún no llegaron a Misiones las dosis prometidas. Tampoco se sabe con precisión la cantidad que llegará, pero el ministro de Salud Pública Héctor González anticipó que serían unas 10.000, cuando la población objetivo adolescente ronda los 100 mil.
En la presentación del plan nacional de dengue se ratificó una estrategia de vacunación focalizada en lo departamentos con mayor incidencia de casos, para lo cual la Nación realizó la adquisición de dosis en complemento del stock con los que cuentan las provincias que ya adquirieron para cumplir con lo proyectado en esta etapa. Pero aún no precisaron cuándo comenzarán a distribuir las dosis.
“En el listado de las ocho herramientas, la vacunación es la séptima, porque no debemos anteponer las tareas para evitar la proliferación del vector porque sino la vacuna puede jugarnos en contra en vez de colaborar a la cuestión epidemiológica general”, destacó Ramírez.
En lo que va de 2024 suman 564.144 casos
Otros dos municipios terminaron la semana pasada el Levantamiento Índice Rápido de Aedes aegypti (LIRAa), se trata de Alem y Apóstoles.
Estas acciones de monitoreo del Aedes aegypti – transmisor del dengue- se llevan adelante con el fin de identificar las zonas de mayor riesgo para la estratificación de acciones de prevención control, monitoreo y captura de larvas.
Los resultados del último LIRAa en Posadas, realizado en abril, mostró índices aédicos muy similares a ese mismo mes del año pasado, es decir antes de la gran epidemia.
No obstante a las proyecciones de los epidemiólogos que advierten de la posibilidad de un nuevo brote de dengue en los próximos meses, la situación de estas últimas cuatro semanas difieren de las del año pasado. Según el último Boletín Epidemiológico Nacional, en las últimas cuatro semanas se notificaron 23 casos confirmados de dengue mientras que en 2023 se registraron en el mismo período 924.
Según datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación, en lo que va del año, se notificaron 745.238 casos y se identificaron 564.144 casos de dengue en todo el país. En ese mismo período, Misiones reportó 19.244 notificaciones y 14.133 casos de dengue diagnosticados en forma clínica pero solo 7.462 fueron confirmados por laboratorio.
Hace más de un mes no se reportan nuevas notificaciones.