Este jueves, la Policía local intervino en un domicilio del Barrio Milagros, en Aristóbulo del Valle, tras recibir reportes de ruidos fuertes y gritos de menores que provenían del interior de la vivienda. En el lugar, fue aprehendida una mujer de 29 años, bajo acusaciones de agresiones físicas y psicológicas hacia sus hijos menores, de 11 y 10 años respectivamente.
Se trata del mismo hogar que a finales de abril conmocionó a la ciudad debido que la hija mayor de la familia, Daniela Martínez de 13 años, fue encontrada sin vida. Horas después se abrió una causa judicial donde intervino el Juzgado de Instrucción 2 de Oberá a cargo de Horacio Alarcón debido a que muchos vecinos denunciaron que la menor era víctima de violencia familiar por parte de su madre.
Volviendo al operativo de hoy, el mismo tuvo lugar a las 10:30 horas. Según informaron fuentes policiales, se encontraba en un estado de alta violencia y fue detenida mientras sus hijos fueron trasladados al hospital local para recibir la debida asistencia médica.
Los menores quedaron bajo resguardo de las autoridades hasta que se estableciera su seguridad. Tras ser notificado, el Juez de Paz ratificó el procedimiento, y el Juzgado de Familia local dispuso que los niños quedaran bajo el cuidado de su padre, quien vive separado de la madre.
Mesa interdisciplinaria
Tal como lo contó PRIMERA EDICIÓN, tras la muerte de Daniela Martínez, se formó en Aristóbulo del Valle una mesa interdisciplinaria con funcionarios de la Defensoría de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la Provincia, la Dirección de Niñez y Adolescencia del Municipio, de la Comisaría de la Mujer y del Juzgado de Instrucción 2,con el objetivo de acompañar y a brindar herramientas para el resguardo de los hermanitos, que en ese momento tenían de 9 y 10 años.
En ese momento, la Defensora de Niños, Niñas y Adolescentes de Misiones, Rosanna Franco, confirmó a FM 89.3 Santa María de las Misiones que ambos niños permanecerían bajo la tutela de su abuela paterna mientras dure la investigación judicial. Sin embargo, en el transcurso de estos meses, habrían vuelto a vivir con su madre.

“Lo que se hizo fue resguardar a los niños, buscar una familia extendida y aparece una abuela que estuvo acompañando el proceso. Así que se optó por entregarlos a ella quien va a estar resguardando a los niños hasta que se resuelva toda la situación”, indicó.
Tras conocerse el fallecimiento de Daniela, muchos vecinos denunciaron que la joven era víctima de violencia familiar física y psicológica por parte de su madre. Por ello llevaron adelante una marcha pidiendo Justicia.
“Había mucho maltrato por parte de su madre. Le pegaba mucho a los tres hermanitos. Ella salía los fines de semana y la nena tenía que quedarse en la casa cuidando a sus hermanitos. Había veces que la madre desaparecía por varios días y los vecinos le daban de comer a los tres niños”, contó una vecina, que prefirió mantenerse en el anonimato, a PRIMERA EDICIÓN.
El relato anterior fue ratificado por otra vecina que habló con FM Santo Encantado. “La madre la maltrataba y la golpeaba mucho”, contó.