Una nueva polémica surgió en las redes durante las últimas horas por la aparición de los principales influencers de argentina promocionando un producto para aliviar dolores de cabeza. Streamers, tiktokers, actores, entre otros, publicaron videos y fotos en sus cuentas con un link que los llevaba directamente a la “tienda” para conseguirlo. Sin embargo, el cuestionamiento es qué hay detrás de toda esta movida.
Todo se trataba de una estrategia de marketing de la prepaga de salud Swiss Medical que lanzó una campaña bajo el nombre “Swilina Forte” para concientizar sobre los riesgos de la automedicación, una práctica común que a menudo acarrea consecuencias graves para la salud. Esta iniciativa, disfrazada de lanzamiento de un medicamento “milagroso” que, en realidad, no existe, ha generado un fuerte impacto en redes sociales, donde numerosos influencers promovieron el producto ficticio, solo para revelar después el verdadero mensaje: la importancia de consultar a médicos profesionales.
La movida fue diseñada para hacer reflexionar sobre la tendencia de muchos usuarios a seguir recomendaciones de salud sin respaldo profesional. Bajo la premisa de “la cura mágica para todo”, la campaña utilizó el humor y la sorpresa para captar la atención. Al hacer clic en los enlaces de estos anuncios en redes sociales, los usuarios eran dirigidos al sitio oficial de Swiss Medical, donde se revelaba la finalidad de la campaña: combatir la automedicación y el autodiagnóstico.
La empresa contó con la colaboración de varios influencers y figuras públicas, como los streamers Luquitas Rodríguez, Germán Beder y Alfredo Montes de Oca, la sexóloga Cecilia Ce, y personalidades del deporte como la jugadora de hockey Julieta Jankunas. También participaron humoristas como Santiago Korovsky y Martín “El Trinche” Dardik, quienes sumaron su voz para enfatizar la importancia de consultar a profesionales de la salud.
Los peligros de la automedicación
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 50% de los medicamentos a nivel global se recetan, dispensan o venden de manera incorrecta, y la mitad de los pacientes no sigue las indicaciones adecuadamente. Este “uso irracional de medicamentos” puede derivar en un desperdicio de recursos y aumentar la probabilidad de efectos adversos, al reducir la efectividad de los tratamientos.
Swiss Medical recuerda que, si bien existen múltiples fuentes de información en internet, la mayoría de ellas no cuenta con la validación de profesionales de la salud. “La mejor forma de cuidar nuestra salud es consultando a quienes más saben: los médicos”, comunicó la empresa. Además de sus centros médicos y la posibilidad de realizar teleconsultas, Swiss Medical lanzó un nuevo servicio llamado “Chateá”, que permite a sus afiliados hablar con un médico por WhatsApp en cuestión de minutos, promoviendo así el acceso a atención médica profesional y confiable.
La OMS define la automedicación como el uso de medicamentos para tratar síntomas o enfermedades menores sin la supervisión de un profesional. Aunque puede hacerse de manera responsable, la falta de información adecuada convierte a esta práctica en un riesgo potencial. Swiss Medical subraya que la automedicación, motivada por información no verificada en redes sociales o recomendaciones de personas no especializadas, puede llevar a diagnósticos erróneos y tratamientos inadecuados.
Con esta campaña, Swiss Medical espera contribuir a una toma de conciencia sobre los peligros de la automedicación y el autodiagnóstico.