La liquidación del aguinaldo a los trabajadores estatales en los 78 municipios de Misiones evidencia profundas desigualdades salariales, que “se ven reflejadas en la falta de un piso mínimo”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el secretario administrativo de ATE, Marcelo Graziadei, quien además enfatizó que “el pago del aguinaldo en los municipios es diverso; hay algunos que tienen gran parte del salario en negro, pero a pesar de eso pagan el 50% de lo que los compañeros reciben como sueldo en su totalidad, cuando les liquidan el aguinaldo; mientras que en otros están pagando únicamente por lo que está en blanco y no toman lo no remunerativo o en negro. Es una gran pelea que tenemos en los municipios”.
Este fenómeno se observa con frecuencia en municipios pequeños y medianos, “como Garupá y Candelaria, donde muchos trabajadores no ven reflejada la totalidad de su salario en sus recibos de sueldo cuando pagan el medio aguinaldo porque les pagan sobre lo que está en blanco”, denunció el representante sindical.
Y ejemplificó: “Si un trabajador gana $1.000 y percibe la mitad en negro, su aguinaldo se calcula solo sobre la parte que está registrada, es decir, el 50% de $500, lo que deja fuera la porción del salario no remunerativo y lima totalmente el ingreso”, aseguró.
“Esta situación no solo afecta el bienestar de los trabajadores, sino que refleja un problema estructural que impacta directamente en la calidad de vida de miles de compañeros”, aseguró.
“Esto provoca que trabajadores que realizan tareas idénticas, como los recolectores de residuos, cobren diferentes montos dependiendo del municipio donde se encuentren empleados, por ejemplo uno de Candelaria o Garupá con un recolector de Oberá, donde los primeros tienen salarios de $260.000 para esa tarea en la Capital del Monte percibe $700.000”, afirmó Graziadei.
Luego mencionó otros municipios donde tampoco se liquida el pago especial por el total de los ingresos (en blanco y no remunerativos), como en Libertad e Hipólito Irigoyen.
A su vez, resaltó el caso de San Pedro donde los municipales tienen una porción significativa de los sueldos en negro, pero la liquidación del aguinaldo contempla la totalidad de esas percepciones. No obstante, Graziadei no dejó pasar la oportunidad de cuestionar los pagos no remunerativos porque tal práctica reduce derechos a los trabajadores y aparecen las disparidades con el aguinaldo o bien al momento de las jubilaciones, porque en la deducción cobran menos que la mínima.
“La distorsión existe y afecta las mejoras salariales”
En un análisis más profundo por caso, la falta de un salario completo “en blanco” genera una distorsión que afecta, incluso, a los incrementos salariales que se logran negociar en las paritarias.
“Por ejemplo, en Hipólito Irigoyen, los aumentos salariales negociados se distribuyen de tal manera que solo una pequeña parte se incorpora al salario básico. Esto resulta en un salario final muy bajo para los trabajadores, a pesar de las mejoras nominales logradas”, señaló. El municipio de Iguazú también realiza la misma práctica con sus asalariados.
“Un municipal que realiza trabajo de recolección de basura en Iguazú o en Garupá no cobra lo mismo que un compañero en Aristóbulo del Valle u Oberá, pese a que la tarea es idéntica. Esta diferencia salarial no solo es injusta, sino que va en contra de los principios constitucionales de a igual tarea, igual remuneración y ni hablar que vuelve flacos a los aguinaldos”, prosiguió Graziadei.
En Apóstoles, los trabajadores municipales pueden recibir salarios cercanos a la media provincial; pero en otras, como en las pequeñas comunas de la zona sur, San José, Profundidad o Cerro Corá, donde no hay organización gremial, los sueldos siguen siendo bajos y los incrementos salariales aprobados recientemente no superan el 3% en el básico: “Esto genera una brecha salarial profunda entre los trabajadores que desempeñan las mismas tareas en diferentes localidades”.
Precarización y desigualdad
Ante esta situación de precarización y desigualdad, desde ATE se viene trabajando en la presentación de dos proyectos ante la Cámara de Diputados de Misiones, el primero para establecer por ley un piso salarial para todos los trabajadores municipales de la provincia. El objetivo es garantizar que ningún trabajador cobre por debajo de un salario mínimo digno, similar al que tienen los trabajadores de la administración central, con el fin de cerrar las brechas salariales entre los municipios.
El otro, que puede llevar más tiempo, es la creación y aprobación de un convenio colectivo de trabajo marco para los municipios, para garantizar derechos básicos para todos los municipales.