Durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo se produce un aumento de los eventos cardiovasculares, como consecuencia fundamentalmente de tres factores asociados como lo son la postergación para ir al médico, los excesos y las emociones.
Según los especialistas, ante algún malestar, la gente consulta más tarde o al otro día para no arruinar la reunión, entrando en juego aquí el factor de la “postergación”.
En cuanto a los “excesos”, los médicos advirtieron que en una comida navideña se pueden llegar a ingerir 9.000 calorías, lo que está muy por encima de lo recomendado.
Además, en esta especial época del año entran en escena las “emociones” como un factor asociado a los problemas cardiovasculares.
Esto se debe a que la llegada de fin de año es percibida por la mayor parte de las personas como un cierre de ciclo y una profunda evaluación de las metas alcanzadas y de aquellas que no se lograron.
Muchos están solos o recuerdan con dolor los seres queridos que ya no están.
Desequilibrios
Asimismo, los procesos biológicos que desencadenan estos eventos incluyen la desregulación del sistema nervioso autónomo, la activación neuroendocrina de mecanismos inflamatorios y de coagulación, que se asocian a la ruptura de placas y que promueven el ataque cardíaco.
Esto puede agravarse porque la gente suele minimizar los síntomas o postergar la consulta, ya sea para no preocupar a los otros familiares o por la percepción de tener dificultad de obtener atención medica en estas fechas y horarios.
Es recomendable prestar atención al cuerpo y sus síntomas en caso de una descompensación durante las fiestas y no dejar pasar las horas para realizar una consulta. La prevención y actuar a tiempo es clave
Una comida equilibrada
Los especialistas indican que si el plato principal durante las fiestas es de carnes, es necesario elegir las magras y acompañarlas de vegetales.
Para aderezar las ensaladas, evitar mayonesas u otras salsas: optar por aceite de oliva y medir la cantidad (una cucharada sopera).
La propuesta es llevar una gran ensalada de vegetales crudos con predominancia de vegetales verdes y de postre, ensalada de frutas naturales de estación sin agregado de azúcar.
En lo posible, no consumir pany beber jugos sin azúcar.
Un consejo clave
Se recomienda beber abundante agua, entre 2,5 y 3 litros por día, y mantener la actividad física habitual o incorporar caminatas diarias.
Además, se aconseja moderar la ingesta de alcohol a no más de dos copas diarias.