Con la presunción que cruzó a Brasil tras abandonar su automóvil en la costa del río pero sin más pistas o rastros del joven de 27 años que arremetió a los tiros dentro de una sede policial en Colonia Alicia. Así está el caso del hombre buscado por “intento de homicidio”.
Fuentes en contacto con PRIMERA EDICIÓN confirmaron operativos de rastrillajes por la zona y alrededores pero al menos hasta ayer sin resultados positivos.
Buscan al joven de 27 años que el viernes atacó a su pareja, una cabo de Policía, en el interior de la sede donde presta servicio. Supuestamente una discusión antes que la mujer tomara su guardia, desató al furia del sospechoso quien ingresó y efectuó al menos cinco disparos con un arma de fuego calibre 9 milímetros o 380 (muy similar a 9mm).
Si bien el cuadro encajaría en un hecho de intento de femicidio, los detalles de como se desataron las acciones y pormenores, recién surgirán con las testimoniales que pueda tomar el juez de Instrucción 2 de Oberá, Horacio Alarcón.
Por el momento la causa fue calificada como “homicidio en grado de tentativa” ya que según supo este Diario, el disparo que más cerca estuvo de dar con la humanidad de una persona, fue a un sargento de policía y compañero de la mujer del sospechoso. Otro dato que trascendió es que el hombre tendría familiares en Brasil y que ya estuvo involucrado en un hecho de violencia o con disparos de arma de fuego, en aquella oportunidad con vecinos.
Antes de la guardia
El hecho se inició a las 19.10 del último viernes, en el destacamento de la localidad de Alicia Alta, cuando un agricultor que es cónyuge de una cabo que estaba de guardia en el lugar, se presentó armado.
Hubo una discusión breve, luego amenazas por parte del individuo hacia la mujer. Acto seguido, se desató una verdadera “lluvia de plomo”, según dijeron los testigos que a su vez tuvieron que repeler el ataque de la misma manera.
Posteriormente se localizó el vehículo del hombre abandonado a orillas del río Uruguay, más precisamente en una zona conocida como paraje Villa Fañe, en Colonia Aurora, con manchas presumiblemente de sangre. Esto de algún modo desconcertó a los investigadores, ya que en la zona un pescador dijo llevar a una persona del otro lado de la orilla pero que no notó que estaba herido.
Posiblemente sea otra persona o sino el sospechoso estaba con una lesión menor casi imperceptible. También investigan a otros pescadores de la zona que pudieron colaborar con la fuga del sospechoso aunque todavía no hay nada concreto. Hasta el cierre de esta edición, el joven seguía prófugo.