Pese a estar la inversión hecha y los permisos de circulación autorizados tanto por Paraguay como por Argentina, la habilitación del servicio de balsa entre la localidad misionera de Puerto Libertad y la localidad Domingo Martínez Irala está en carpeta desde hace tres meses.
Desde noviembre del año pasado, se aguarda la autorización de la Aduana Argentina y de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA). Que este miércoles la empresa haya traído la balsa desde el Puerto de Ciudad del Este hasta Puerto Irala no fue un indicio de avance de la gestión sino más bien una decisión para tratar de reducir los costos de embarcadero en esta espera que se da en pleno pico de demanda de cruce desde Argentina hacia Paraguay y Brasil.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, el secretario municipal de Domingo Martínez Irala, Claudelino Bogado, confirmó que “la única novedad es el traslado de la balsa desde Ciudad del Este a Puerto Irala donde no tendrán que pagar por tener atracada la embarcación en nuestro puerto. Para la empresa la balsa fue una gran inversión de dinero y lo cierto es que no pueden comenzar a recuperar nada de lo invertido, es una pena. No solo no pueden recuperar sino que les genera gastos fijos”, detalló.
“Una pena”
Bogado anticipó que la próxima semana tendría lugar en Puerto Libertad, “la información que tenemos es que habrá cambios en la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA)”.
Lamentó la demora de la habilitación de este cruce en balsa “pasamos las fiestas de fin de año sin que haya sido habilitado, lo cual lamentamos mucho porque obligó a la mayoría de los conductores argentinos que querían ir a Ciudad del Este o hacia Santa Catarina (Brasil) a hacerlo a través del Puente de La Amistad, cuando nuestro cruce en balsa era una opción más rápida y directa para muchos”.
Bogado calificó como “una pena” la demora en la habilitación del servicio de balsa “tanto para nosotros como para los argentinos porque el intendente de Puerto Libertad, Fernando Ferreira, está pendiente de esta gestión tanto como nosotros, hace tres décadas que estamos trabajando sobre este proyecto y por fin tenemos todo, la empresa inversionista, gastos de aquí para allá y lógicamente los empresarios quieren recuperar lo invertido y hasta la fecha no lograron nada, solo le generan pérdidas”.
“Está todo listo para empezar a operar”
Bogado reconoció que la decisión de trasladar la balsa a Puerto Irala “es también una medida simbólica de presión”. La balsa llegó este miércoles a Puerto Irala y el intendente Derlis Benegas dio la bienvenida a los tripulantes y a su capitán. “Para nosotros fue un día memorable, pero ojalá podamos concretar la habilitación definitiva por el lado argentino”, aseveró.
Según indicó, la empresa tiene el recurso humano seleccionado y en actividad “si Argentina dice que mañana puede empezar a operar, ya tienen todo para poder hacerlo”.
La balsa tiene una extensión de 50 metros de longitud y 12 metros de ancho, “entran unos 30 vehículos livianos y alrededor de 160 pasajeros”, detalló. Es una balsa nueva que costó alrededor de veinte millones de dólares.
La balsa “Rainha Irala” y el remolcador fueron construidos en el astillero de la Asociación de Pescadores de Presidente Franco (Paraguay). El costo fue de 30 millones de dólares, tiene una capacidad para 32 vehículos y 160 personas; en principio operará con vehículos de porte menor. Es propietaria de la embarcación la firma brasileña Macuco Safari, y será operada por Macuco Ecoaventura y Navegación SA.