El Gobierno nacional avanzó con la desregulación del mercado de gas licuado (GLP), eliminando los precios máximos de las garrafas y modificando el Programa Hogar, a través de la Resolución 15/2025 de la Secretaría de Energía, publicada este viernes en el Boletín Oficial.
La norma elimina los precios máximos establecidos para productores, fraccionadores y distribuidores, manteniendo únicamente precios de referencia “para guiar el mercado”. Además, introduce un sistema de subsidios directos a hogares de bajos recursos y viviendas de uso comunitario, con valores diferenciales según las características y ubicación de cada familia.
En diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, Omar Cabral, presidente de MiscoopGas, advirtió que esta medida supone un cambio de reglas significativo, con desafíos especialmente para empresas más pequeñas como las que operan en Misiones. Según explicó, hasta ahora las fraccionadoras accedían al gas a través de un programa nacional que fijaba cupos anuales, precios subsidiados y proveedores asignados. Sin embargo, con la nueva normativa, cada empresa tendrá libertad para negociar con distintos productores y determinar sus volúmenes de compra en función de su capacidad operativa.
Además, afirmó que para los consumidores de Misiones, la medida tendrá un impacto significativo debido a las particularidades logísticas de la región. “Antes, sabíamos de dónde íbamos a obtener el producto y cuánto podíamos comprar a un precio subsidiado. Ahora todo queda librado a nuestra capacidad de negociación en un mercado abierto, donde ya debemos trabajar con el precio de paridad de exportación que fija la Secretaría de Energía mes a mes”, detalló Cabral.
Otro cambio destacado es la posibilidad de cargar gas en bocas de carga más accesibles. Para las empresas misioneras esto representa una ventaja operativa, ya que “no es lo mismo cargar en La Plata que en Luján de Cuyo, Mendoza, o Loma de la Lata, Neuquén. Esta mayor libertad de acción permitirá optimizar los costos según las posibilidades de cada empresa”. Sin embargo, advirtió que los costos logísticos seguirán siendo un factor determinante.
“El transporte y la distancia juegan un rol preponderante. Al ser una empresa local, todo lo que comercializamos se vende en Misiones, lo que nos coloca en desventaja frente a las grandes empresas nacionales con operaciones más diversificadas”, explicó.
En cuanto al impacto en los consumidores, Cabral indicó que, actualmente, el precio promedio de una garrafa en Misiones ronda los 14.000 pesos, aunque esta cifra podría incrementarse en las próximas semanas. Esto dependerá del precio de paridad de exportación que publique la Secretaría de Energía y de las nuevas condiciones del mercado. Además, anticipó que la desregulación traerá consigo una mayor disparidad de precios dentro de la provincia, una situación que ya se venía observando entre Posadas y el interior, y que podría acentuarse entre distintas localidades debido a las diferencias en los costos logísticos.
Por el momento, el precio de referencia nacional, fijado en 10.500 pesos por la Secretaría de Energía, seguirá vigente hasta que se anuncien los nuevos valores. Sin embargo, Cabral aclaró que este precio no es realista para Misiones, donde los costos de transporte encarecen significativamente el producto. “Ese precio está pensado para el centro del país. Aquí, el costo adicional de traer el gas siempre se traduce en un precio más alto para el consumidor final”, remarcó.
Si bien el Gobierno argumenta que la desregulación busca crear un mercado más competitivo y eficiente, basado en la oferta y la demanda, desde el sector prefieren adoptar una postura cautelosa hasta que el nuevo esquema esté completamente implementado.
“Este es un hecho real y tendremos que manejarlo en este nuevo escenario. Estamos en tratativas con proveedores, pero hay muchas variables que aún no están claras”, concluyó Cabral.