Desde 2017, se dedica el 27 de enero de cada año a las madres extractoras de leche materna. El objetivo de este Día Mundial de la Extracción de Leche Materna es reconocer el tiempo, esfuerzo y dedicación que conlleva el proceso de extracción de leche materna para las madres.
Existen dos principales motivos por los que las madres realizan la extracción de leche materna, ya sea por alguna condición de separación entre mamá y bebé debido a alguna enfermedad u hospitalización de cualquiera de los dos o porque las condiciones laborales de las madres requieren que, durante el tiempo que se encuentran en sus sitios de trabajo, su hijo sea alimentado con leche materna por medio de algún dispositivo de alimentación: biberón, vaso, jeringa, entre otros.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere preservar la lactancia materna al menos los dos primeros años de vida de los niños, por lo que las empresas cada vez están poniendo mayor atención e interés por garantizar espacios seguros para que las colaboradoras puedan lograr extraerse leche durante la jornada laboral.
Las madres en etapa de lactancia que están próximas a regresar al trabajo pueden comenzar su banco de leche de 2 a 3 semanas antes de reiniciar la jornada laboral y pueden realizarse extracción manual o contar con algún dispositivo que apoye en la efectividad de esta práctica.
Consejos para la extracción de la leche materna
- Lavarse adecuadamente las manos con agua y jabón antes de manipular la leche.
- Almacenar la leche en un recipiente de vidrio o si es plástico, asegurar que está libre de bisfenol A (BPA).
- Existen bolsas para almacenar la leche materna, son de un solo uso.
- Se aconseja almacenar la leche entre 2 y 4 onzas por recipiente
- Una vez extraída la leche, etiquetar con fecha, hora y cantidad de onzas que se lograron con la extracción.
- Si la madre se encuentra en la jornada laboral, debe realizarse la extracción en las horas que el bebé requiere ser alimentado, esto para continuar con el estímulo de la producción de leche.
- Transportar la leche a casa en una hielera destinada únicamente para este alimento.
- Acudir con una consultora en lactancia si fuera necesario.
Métodos de preservación de la leche materna
Temperatura ambiente: Puede mantenerse hasta 6 horas.
Refrigerador: Puede mantenerse de 3-5 días.
Congelada: Puede mantenerse por 6 meses.
Una vez descongelada no se puede volver a refrigerar o congelar: si no se utiliza, será necesario desecharla.
¿Qué tipos de leche produce una madre?
La leche materna es conocida como “oro líquido”, por todos los beneficios que aporta al bebé que la recibe.
A continuación, algunos datos generales sobre los tipos de leche que produce la madre según el paso del tiempo, dependiendo de la edad y necesidades del bebé.
El Calostro
Es la primera leche que producen los pechos de la madre, en los primeros días después del parto. Tiene una textura densa y viscosa, de color amarillo o anaranjado. Los ingredientes del calostro son los mismos que los de la leche que se produce en las próximas etapas, pero las cantidades son diferentes y están adaptados a las necesidades del recién nacido.
Se habla del calostro como de una vacuna natural, esto por sus elevados niveles de anticuerpos y glóbulos blancos, además de contener propiedades que protegen al bebé de infecciones y enfermedades tras abandonar el útero materno.
La leche de transición
Entre los días 5 y 14 la madre empieza a notar sus pechos con más leche materna, esta leche es conocida como leche de transición. Su textura se vuelve más cremosa, aumenta su nivel de grasa, calorías y lactosa, lo que la convierte en el alimento ideal para un rápido crecimiento en el recién nacido.
Leche madura
A las 4 semanas de edad del bebé, la leche de la madre se considera totalmente madura. Es rica en proteínas, azúcares, vitaminas y minerales, además de que cuenta con una gran cantidad de componentes que ayudan al crecimiento y desarrollo saludable del bebé.
Fuentes: Nova Ciencia y donandoleche.org