Las pechugas del pollo al horno jugosas pueden ser difíciles de lograr: mucha gente se pregunta cómo cocinarlas sin secarlas.
Sin embargo, con los tips necesarios (y un marinado delicioso) se va a volver un plato del día a día en tu casa.
Para empezar, una recomendación: no las cocines de más. Una pechuga jugosa no es una pechuga cruda. La pechuga de pollo se seca cuando la cocinamos más de lo necesario.
Ingredientes para cuatro porciones
• 4 piezas de pechuga de pollo
Para el marinado
• 2 cucharadas de azúcar rubio
• 2 cucharaditas de paprika
• 2 cucharaditas de orégano deshidratado
• 2 dientes de ajo molidos o rallados finamente
• 2 cucharadas de salsa de soja
• 2 cucharaditas de mostaza Dijon
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta a gusto
Paso a paso
1. Para el marinado: Mezclá todos los ingredientes en un bol pequeño usando un batidor de mano.
2. Para el pollo: Cubrí las pechugas con papel de cocina y dales golpecitos con un rodillo para nivelar el ancho. En particular queremos adelgazar las partes más anchas de la pechuga.
3. Cubrí las pechugas con el marinado por todos lados y dejá que se marine por 1 hora.
4. Poné las piezas de pollo una al lado de la otra en una fuente apta para horno.
5. Hornealas en un horno precalentado a 200°F/400°F por 30 minutos o hasta que el centro de las pechugas haya llegado a 73°C/164°F.
6. Retiralas del horno y dejá que descansen por 10 minutos antes de servir.