Misiones atraviesa una intensa ola de calor, con temperaturas extremas y un índice de radiación ultravioleta catalogado como “extremo”. La provincia se encuentra en alerta naranja debido a las altas marcas térmicas que afectan especialmente al centro y sur del territorio. Este martes, los termómetros alcanzarán los 38°C, mientras que en las primeras horas de la mañana Posadas ya figuraba entre las ciudades más calurosas del país.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre los efectos de estas condiciones climáticas, que pueden representar un riesgo para la salud, especialmente en niños, adultos mayores y personas con enfermedades preexistentes. En este contexto, en diálogo M 89.3 Santa María de las Misiones, el director de la Oficina de Prevención Ante Desastres Naturales (OPAD), Favio Cabello, admitió que el calor extremo continuará hasta mediados de mes, cuando las temperaturas comenzarán a descender gradualmente.
Además, adelantó que para el jueves y viernes próximos se pronostican chaparrones y tormentas aisladas en Misiones, el norte de Corrientes, el este de Formosa y Chaco, y en Paraguay. Algunos de estos fenómenos podrían ser intensos, con ráfagas de viento, caída de granizo y lluvias de hasta 50 milímetros en una hora. Sin embargo, estos episodios no modificarán el actual déficit hídrico.
“Atención porque algunos de estos fenómenos pueden ser fuertes de manera aislada. No se descarta la posibilidad de granizo, ráfagas intensas de viento o incluso aguaceros con acumulaciones de 40 o 50 milímetros en una hora, que son precipitaciones típicas de verano.De todas maneras, esto no significa que la sequía se termine. Seguimos bajo los efectos de La Niña, que nos va a acompañar hasta marzo por lo menos. Pero en el medio vamos a tener este tipo de ‘paréntesis’ con lluvias más intensas”, remarcó el meteorólogo.
Enero cerró con una precipitación acumulada de solo 74 milímetros, lo que representa apenas el 44% del promedio habitual, comentó Cabello y agregó que en Posadas, donde el registro normal para febrero es de 137 a 138 milímetros, la primera quincena difícilmente alcanzará los 20 milímetros. Aun si las lluvias aumentan en la segunda mitad del mes, será difícil compensar la falta de precipitaciones.
La sequía, provocada por el fenómeno de La Niña, continuará al menos hasta marzo. En este contexto, Cabello recomendó evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratado y usar protector solar. También advirtió sobre el alto riesgo de incendios forestales y llamó a la población a extremar las precauciones para prevenirlos.
Si bien las condiciones seguirán siendo calurosas y secas en las próximas semanas, se espera que en abril las lluvias vuelvan a valores normales, con acumulaciones mensuales de entre 100 y 150 milímetros. Mientras tanto, la segunda quincena de febrero traerá un leve descenso de temperatura y una mejora en el régimen de precipitaciones.