El Parque Nacional Nahuel Huapi enfrenta una grave situación debido a incendios forestales que han consumido más de 18 mil hectáreas. Los cuatro incendios más significativos en la región han llevado a los brigadistas a trabajar arduamente para controlar el fuego, especialmente en áreas críticas donde se encuentran viviendas y ecosistemas importantes.
Se ha determinado que al menos tres de estos incendios podrían haber sido provocados intencionalmente. En respuesta a esta situación, los gobernadores de las provincias patagónicas han acordado un protocolo regional para coordinar esfuerzos en la lucha contra los incendios y para prevenir futuros siniestros.
La preocupación por nuevos episodios de incendios es alta, especialmente con pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional que indican que las precipitaciones serán inferiores a lo habitual y las temperaturas, superiores a la media. Esto aumenta el riesgo de que se produzcan más focos de incendio en los próximos meses.
Por ello, los mandatarios de las provincias afectadas, como Río Negro y Chubut, han elaborado un documento conjunto que resalta su compromiso en la lucha contra los incendios. Este documento enfatiza la necesidad de fortalecer la prevención y el control del fuego en la región cordillerana, donde los incendios han tenido un impacto devastador.
A pesar de los esfuerzos, las condiciones climáticas adversas complican aún más la situación. Actualmente, la prioridad de los brigadistas es proteger las viviendas y estructuras cercanas al fuego, mientras se implementan operativos de control en áreas pobladas para minimizar el daño.
Fuente: Noticias Argentinas