Los incendios forestales continúan azotando diversas regiones de Argentina, dejando un saldo devastador en Corrientes, El Bolsón, el Parque Nacional Nahuel Huapi y Epuyén. Hasta el momento, se han consumido más de 250 mil hectáreas en Corrientes, 3.500 en El Bolsón, más de 10 mil en Nahuel Huapi y otras seis mil en Epuyén, afectando gravemente la biodiversidad y forzando evacuaciones.
En El Bolsón, provincia de Río Negro, el fuego lleva 11 días activo y ha obligado a miles de vecinos a autoevacuarse ante el avance de las llamas. La situación se agrava por los fuertes vientos y la sequía persistente, dificultando las tareas de contención del incendio.
Por otro lado, en el Parque Nacional Nahuel Huapi, el incendio lleva más de 40 días sin poder ser controlado. Hasta ahora, ya se han consumido más de 10 mil hectáreas, y los expertos advierten que la situación podría empeorar en los próximos días debido a las condiciones climáticas adversas.
En Epuyén, Chubut, aunque el fuego ha sido contenido, las autoridades continúan en alerta ante la posibilidad de nuevos focos de incendio. En lo que va del año, se han quemado más de 3.500 hectáreas en esta región.
El escenario más crítico se vive en Corrientes, donde el fuego ha arrasado con más de 250 mil hectáreas en lo que va de 2025. La desesperación crece entre bomberos, rescatistas y productores rurales, quienes trabajan incansablemente para contener las llamas. En la provincia operan dos aviones hidrantes, un helicóptero y dos brigadas del noreste del Sistema Nacional del Manejo del Fuego, junto con equipos de bomberos y agentes de Defensa Civil.
Ante la magnitud de la tragedia, en todo el país se están organizando diversas campañas solidarias para apoyar a quienes están combatiendo los incendios. La crisis ambiental y social derivada de estos siniestros plantea un desafío urgente para las autoridades y la sociedad en su conjunto, en un contexto donde el cambio climático y la acción humana juegan un rol determinante en la propagación de los incendios.