
La tensión en el conflicto yerbatero alcanzó su punto máximo en las últimas horas, cuando un violento episodio protagonizado por productores y camioneros dejó en evidencia la gravedad de la situación que atraviesa el sector.
En un intento por impedir que camiones cargados con yerba ingresen a un conocido secadero de San Pedro, un colono fue víctima de un intento de atropellamiento.
Los insultos, empujones y agresiones reflejan el clima de desesperación que se vive en el corazón de la producción de yerba mate, un conflicto que se libra a diario entre pequeños productores y los poderosos actores de un mercado que les es ajeno y cruel.
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Durante toda la mañana de este martes hubo amenazas, por el lado de los colonos a favor la medida para impedir que los camiones cargados con yerba ingresen a los secaderos, como del lado de quienes intentaron entregar el producto.
A medida que las tensiones crecen, se hace más evidente que los productores están atrapados en una encrucijada: seguir trabajando en condiciones extremas por un salario que no cubre ni lo más elemental, o arriesgarse a perder todo lo que han construido a lo largo de años de esfuerzo.
Con el correr de las horas, PRIMERA EDICIÓN pudo saber que este mediodía hay un corte de la ruta nacional 14, en San Pedro, aunque es por tiempo indeterminado y no se comentó la modalidad de la medida de fuerza.
Este conflicto no es solo económico, es un reflejo de una crisis que va más allá de los números y las cifras, ya que surgió a partir de la decisión del Gobierno Nacional de desregular el precio en un mercado oligopólico y en donde la producción perdió voz y voto para exigir precio de referencia para el producto. Hoy se paga $210 por kilo de hoja verde puesto en secadero. La medida de este martes fue para reclamar un total de $457, para que de esa forma al productor le quede un 30% de ganancia por cada unidad que entregue.