Guillermo González, o más conocido como Willy, es un bajista multipremiado en nuestro país, que se dio el gusto de tocar con otros grandes artistas de la escena en todos los rincones de nuestro país y de mundo, y que este fin de semana está en Misiones para dar rienda suelta a sus dos pasiones: la docencia y la música en vivo.
En el primer caso, la conexión será con una clínica musical en el Centro Cultural Vicente Cidade; el segundo con un show en Al Caer el Sol el domingo, en El Brete y junto a sus grandes amigos misioneros.
Antes, Willy, se tomó un tiempo para conversar con PRIMERA EDICIÓN, donde contó que el amor por Misiones comenzó hace mucho tiempo, cuando apenas era un niño y pisó por primera vez la tierra colorada y quedó embelesado con la selva misionera. “Me enamoré perdidamente de su naturaleza tan impresionante”, afirmó.
Como lo hace en el escenario, el bajista no le escapó a ningún tema, tocó todos e incluso dio su opinión sobre la escena actual y cómo ve el uso de la inteligencia artificial en la música.
“Yo creo que es algo que desprecio bastante porque hay un hecho mágico que tiene la vida y que la música es irrepetible. Una máquina no puede experimentar lo que experimenta un ser humano, de ninguna manera”, sentenció González.
El bajista reconoció que utiliza las nuevas tecnologías para nuevas ejercitaciones “con un fin práctico, pero la inteligencia artificial creo que nos va a solucionar más que cuestiones tediosas, como ser rellenar formularios, hacer razonamientos muy complejos”. Pero “lo que es la comunicación, en una cosa tan fundante como es la música, no creo que tenga importancia. Por lo menos en mi mundo no”, afirmó.
Respecto a la actualidad musical, Willy se lamentó porque a los chicos “el algoritmo les dicta lo que tienen que escuchar y es lo que más tiene reproducciones, eso está inducido”. Por el contrario, después “está la vida por debajo de eso, que es lo que los pibes nuevos están queriendo captar, esa esencia de nuestra música, de nuestros maestros, que quieren estudiar, que quieren aprender, con sus proyectos y que van a lograr seguramente con el tiempo tener más relevancia, más preponderancia” en los medios masivos.
En este marco, alentó a los jóvenes a “estudiar” lo más que puedan porque “lo que sucede ahora es que parece que hay mucha información al alcance de la mano, pero la realidad es que si uno no tiene una pequeña guía para escuchar se puede complicar”. Y explicó que quizás “uno puede escuchar a un supuesto maestro del chamamé, por ejemplo, sin que lo sea. Y no conoce a Isaco Abitbol, a un Tránsito Cocomarola, a un Cuchi Leguizamón, a un Raúl Carnota, o a un Eduardo Falú”.
Libro, docencia y amigos
El multipremiado bajista está abocado a la presentación de su nuevo libro “Tocando en criollos”, que tiene muchos episodios. Está el capítulo Zamba, que es el que ya está editado, el capítulo Chacarera, que también está editado, el capítulo Chamamé y en este momento estoy preparando el capítulo de Milonga”.
Explicó que es un libro que tiene la particularidad que “trae partituras, pero que también audios, tiene textos explicativos sobre la historia de cada uno de los géneros de nuestra tierra”. “Tocando en criollo justamente propone un montón de ejercitaciones para poder vincularse un modo más lúdico con nuestra música”, remarcó.
Finalmente, González reconoció que “la música litoraleña es el río, es esa paz, esa tranquilidad y esas aves que no paran de cantar, que es una poesía muy particular que tiene Misiones y todo el Litoral. Es increíble la fuerza que tiene la naturaleza en esta tierra. Cada vez que veo las Cataratas no puedo evitar el llanto”.
Willy González brindará la clínica Tocando en Criollo en FLORA, el Barcito del Centro Cultural Vicente Cidade este sábado a partir de las 19. Está dirigida a músicos, cantantes y amantes de la música popular, siendo un espacio de aprendizaje e intercambio sobre las particularidades rítmicas y armónicas de géneros como el chamamé, la zamba y la chacarera, poniendo énfasis en la improvisación.
Mientras que el domingo, desde la 18, dará un show en el marco de Al caer el sol, junto con Cacho Bernal, Ceci Simonetti, Laura Castellano y Frodo Peralta, en el espacio de El Brete.