La Justicia de Puerto Rico puso tras las rejas a un comerciante mayor de edad, denunciado por enviar fotografías de sus partes íntimas a un menor de edad y compartirle videos pornográficos.
El hecho se descubrió a mediados de enero, pero tendría ya antecedentes en octubre del 2024. Un niño de 10 años fue víctima de acoso sexual del almacenero del barrio quien los incitaba a mirar pornografía a través de videos que le enviaba a su teléfono celular.
El último episodio y que provocó que saliera a la luz el caso, ocurrió una mañana de enero cuando el niño y su padre fueron a pescar a un arroyo en Puerto Piray.
El menor fue enviado al almacén del barrio a buscar una lata con miñocas mientras su padre aprontaba el material para pescar. El niño fue al lugar y el hombre además de entregarle lo que le pidió le dijo que le mandaba “unas cositas” a su celular pero que lo mirara cuando estuviera solo y no contara nada, revelaron fuentes del caso.
Como el niño había dejado el celular en su vivienda, no supo de qué se trataba, pero presentaba cierto temor por algunos antecedentes.
Finalmente, la madre del menor se comunicó con el padre porque su hijo no respondía el celular y estos le dijeron que había quedado en la casa. Oportunidad en que se hizo del aparato y para su asombro vio mensajes del almacenero quien envió varias fotos de su miembro al menor.
Inmediatamente la mujer puso en alerta a su esposo y decidieron denunciar el hecho. En este contexto, el infante se quebró y confesó que varias veces (el año pasado) cuando iba a comprar algo a la tienda, el almacenero le mostraba videos pornográficos y hasta le compartía por Whatsapp. Por temor, los borraba inmediatamente.
La denuncia fue radicada en la comisaría local y una vez al tanto el juez correspondiente, en este caso Leonardo Manuel Balanda Gómez de Puerto Rico, dispuso la detención del acusado.
Se llevó a cabo dos o tres días después ya que se mantuvo prófugo hasta entregarse en la sede policial.
Las fuentes consultadas confirmaron que está imputado por “abuso sexual, suministro de material pornográfico a menores de edad, grooming” y está pendiente la resolución del magistrado en virtud del pedido de la Fiscalía de agregar la figura “corrupción de menores”.
Se confirmó la semana pasada que se le negó el pedido de excarcelación al imputado. Durante los próximos días deberá resolver su situación procesal, una vez que la víctima de su testimonio a través de Cámara Gesell.
Otros posibles casos
La investigación se direccionó a la búsqueda de otros posibles casos en la zona, al menos hasta el momento no hubo denuncias en la comisaría y tampoco en la Justicia. El juez Balanda Gómez ordenó que se investigue.