El comercio resiste y el empleo privado en ese rubro crece en Misiones gracias a los programas Ahora, según datos que se desprenden de un informe del Instituto Provincial de Estadística y Censos (IPEC), el cual revela que, a pesar de la fuerte contracción del empleo, la planta laboral privada en general comenzó un proceso de fortalecimiento.
“Los programas Ahora no sólo han sostenido las ventas en los últimos años, sino que mediante ellos se han generado nuevos puestos de trabajo en el sector privado”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el director de Metodología y Relevamiento Estadístico del IPEC, posdoctor y doctor en Economía, Darío Díaz, tras destacar su importancia para el traccionamiento mencionado, junto con la industria manufacturera.
“Numéricamente ambos sectores presentan crecimiento ininterrumpido del 0,6% para la Industria y 0,3% en Comercio y hemos visto que en ello colaboraron mucho los programas Ahora, que el Gobierno provincial ofrece para estimular el consumo local. Pero, incluso lo que estamos notando va más allá, porque además de sostener las ventas también se han convertido en traccionadores del empleo de forma continua”,enfatizó.
Cabe destacar que actualmente el Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Hacienda, trabaja en conjunto con las cámaras de comercio y la Confederación Económica, para avanzar en algunas correcciones de los programas mencionados, para dar más herramientas de competitividad al comercio misionero.
Transformación
El mercado laboral misionero atravesó por “una transformación profunda” entre el tercer trimestre de 2023 y el mismo período de 2024, según se desprende del pormenorizado informe que compartió Díaz con este Diario,
“El estudio del IPEC, basado en los microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), expone que Misiones perdió 14.430 empleos en el último año, lo que representa una contracción del 3,1%. La caída se atribuye, principalmente, al ajuste del Gobierno nacional sobre el empleo público, en un contexto en el cual la administración pública nacional sufrió una reducción del 25% en su planta laboral, mientras que la enseñanza privada (academias de inglés, cursos y especializaciones) experimentó una disminución del 19,6%”, explicó en detalle sobre la contracara entre lo público y lo privado.
Y en ese sentido insistió: “En contraste, el comercio se consolidó como el principal empleador de la provincia, representando el 28,8% del total de trabajadores registrados en el sector privado. Además, este rubro no solo logró mantener su estabilidad, sino que experimentó un crecimiento”.
“También es importante que se sepa que en materia de Turismo nosotros no hemos visto que el empleo haya caído en esa actividad, por ejemplo como ocurrió en otras provincias, a consecuencia de la salida masiva de argentinos hacia destinos internacionales tentados por el tipo de cambio. De hecho en alojamiento y gastronomía aquí tuvimos un aumento de la ocupación y en esto también cumplieron un rol vital los programas de incentivos al turismo que diseñó el Gobierno misionero, como por ejemplo ‘Date una escapada’”, acotó Díaz.
“A diferencia de otros sectores con fuertes caídas, el comercio, la gastronomía, los alojamientos, el transporte y las tareas administrativas, entre otras mostraron resistencia”, finalizó.
Rol clave en la estructura laboral
En términos absolutos, los puestos de trabajo en el sector comercial pasaron de 102.283, confirmando su rol clave en la estructura laboral de Misiones. Este comportamiento responde a varios factores como los programas de estímulo al consumo y otros incentivos financieros.
“Las cifras demuestran que el comercio no solo resistió la crisis, sino que se mantiene como la base del empleo en la provincia. Sin embargo, para que deje de ser solo un amortiguador y se convierta en un verdadero motor de crecimiento, fue notorio el rol clave del Estado con el fortalecimiento de políticas públicas que favorezcan su expansión”, acotó Díaz.
A su vez, otros rubros que mostraron mayor expansión fueron: Transporte y almacenamiento (+74,2%), impulsado por la creciente demanda del comercio digital. Actividades administrativas (+25,5%), con un mayor uso de servicios tercerizados. Alojamiento y gastronomía (+23,3%), beneficiados por el turismo y los programas de incentivo.
Una actividad que se mantuvo estancada es la construcción. Finalmente, el funcionario del IPEC remarcó que más allá de la pérdida de puestos de trabajo en general, otros indicadores preocupantes son el aumento de la subocupación, que pasó del 8,2% al 10,8%, y de los ocupados demandantes de empleo que se ubicó en 9,1%.