El papa Francisco ha reconocido estar atravesando “un momento de prueba” debido a su estado físico “débil”, según expresó en su mensaje dominical del Ángelus. Desde hace 31 días, el pontífice se encuentra hospitalizado en el Policlínico Gemelli de Roma por una neumonía bilateral.
En su mensaje, el Papa manifestó su solidaridad con otros enfermos, afirmando: “Nuestro físico está débil, pero, incluso así, nada puede impedirnos amar, rezar, entregarnos, estar los unos para los otros”. Además, agradeció a los niños que rezan por él y expresó su deseo de encontrarse con ellos próximamente.
Este domingo el Vaticano difundió la primera foto del papa Francisco desde su internación. Se ve al jesuita argentino de 88 años sentado ante el altar de su capilla privada en el hospital Gemelli de Roma. “Esta mañana, el papa Francisco ha concelebrado la santa misa en la capilla del apartamento de la décima planta del policlínico Gemelli”, explica la Santa Sede.
El último parte médico del Vaticano indica que las condiciones clínicas del Santo Padre se mantienen estables, con una mejora gradual. Continúa recibiendo terapia de oxígeno de alto flujo y fisioterapia motora y respiratoria, lo que ha permitido reducir progresivamente la necesidad de ventilación mecánica no invasiva durante la noche.
Durante su hospitalización, Francisco ha permanecido informado sobre asuntos globales y ha pedido oraciones por la paz en países afectados por conflictos, incluyendo Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Myanmar, Sudán y la República Democrática del Congo.
Además, Francisco no ha dejado de impulsar reformas dentro de la Iglesia católica. El martes relanzó su plan para descentralizar la estructura eclesiástica y fomentar la participación de los laicos. Este proyecto está previsto hasta octubre de 2028, cuando se llevaría a cabo la asamblea final.
Su prolongada internación, la más extensa en sus 12 años de pontificado, ha generado inquietud sobre su continuidad al frente del Vaticano. No obstante, Francisco ha descartado la posibilidad de renunciar, a diferencia de su predecesor Benedicto XVI en 2013.
Fuente: Perfil.