A pesar del fuerte impacto que la recesión económica y la suspensión de la obra pública han generado en el sector de la construcción en Argentina, en Misiones la actividad logró sostenerse en parte gracias a medidas provinciales y el trabajo conjunto con el sector privado. En diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, Héctor Vallejos, secretario general de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) en la provincia, analizó la situación actual del rubro, el nivel de empleo y las perspectivas a futuro en un contexto de incertidumbre.
En principio, Vallejos remarcó que el parate a la obra pública significó un impacto contundente en el rubro, “y de ahí el resultado que miles y miles de trabajadores a lo largo del país quedaron sin trabajo”, sin embargo, admitió que en Misiones se tomaron ciertas medidas que ayudaron de algún modo a atenuar el impacto,“aunque no al ritmo que se venía haciendo, las obras públicas se fueron terminando con recursos de Rentas de la Povincia; infraestructuras viales y demás”.
Además, agregó que esta manera de “atenuar” la situación, derivó en una situación no tan estancada en comparación con otras provincias; “quizás porque tenemos otra fuente de economía e ingresos, como el turismo y otras industrias”.
Sobre datos de la tasa de empleo y desempleo del sector, dijo que las mediciones se realizan a través del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (IERIC), que mide no solo información de empleo, sino también la cantidad de empresas registradas. “Se comparan con el año anterior; obviamente que cayó, en todo sentido, al pararse la obra pública que es casi un 80%”, explicó y advirtió que hay que tener en cuenta que la mayor ocupación de empleo es la construcción de viviendas, “en promedio tres trabajadores por una vivienda, y hoy prácticamente se está haciendo poco y nada; se está terminando lo que estaba en construcción, con recursos de la provincia y trabajo en conjunto con el sector privado y financiero”, pero no se sabe qué pasara de ahora en adelante, “porque no hay una planificación nueva, nada”.
Desempleo
Vallejos explicó que en el sector los trabajadores son temporarios, entonces “es difícil medir cuántos están sin trabajo, depende qué etapa podemos medir”.
Aclaró que el trabajador constructor trata de dedicarse a varias cosas; “tiene el fondo y el seguro de desempleo, mientras tanto, hace una changa, se rebusca. A veces en la parte privada trabaja de forma especializada; después la asistencia que nosotros podemos brindar a él, su familia, salud y demás”.
Consultado si este panorama crítico e incierto a futuro los lleva a permanecer en estado de alerta como gremio y proceder con movilizaciones o acciones similares, Vallejos apuntó que sí, “porque esta situación no es nueva, no es un cuento, ya la vivimos antes. “Sobre la cabeza del trabajador constructor permanentemente existe el fantasma de la desocupación, porque cuando termina una obra y no empieza otra, ese trabajador está desocupado, y muchas de esas obras, para que empiecen, son decisiones políticas, y depende también de la cuestión financiera, de inversión“, precisó.
Relacionó que los constructores no son empleados públicos, “pero dependemos del Estado, dependemos de decisiones políticas del Estado en cuanto a las obras privadas”.
Por último, Héctor Vallejos reflexionó que a pesar de la situación de crisis, siempre se mantienen con optimismo. “Veremos cómo sigue, con la Provincia igualmente estamos trabajando en conjunto, interactuando con propuestas de todo tipo. Siempre decimos que tener un trabajo no es un privilegio, es un derecho“, cerró.