En la ciudad de Oberá, un grupo de vecinos solicitó la intervención de la Policía a través del sistema 911 para resguardar a tres menores que se encontraban solos en su casa. La llamada alertaba sobre la ausencia de adultos responsables pero también por la situación precaria en la que se encontraban los niños.
Al llegar al lugar, una patrulla policial se dirigió a la vivienda ubicada en la Avenida Misiones y calle Posadas. Allí, los agentes constataron que los menores, un niño de 11 años y dos niñas de 3 y 7, estaban sin suministro eléctrico y sin información sobre el paradero de su tutor responsable.
Los vecinos informaron a los policías que la madre había salido a un cumpleaños y no había regresado. Ante esta situación, los efectivos de la Unidad Regional II de Oberá solicitaron la presencia de asistentes sociales de la División de Niñez Municipal para evaluar la situación y brindar el apoyo necesario.
La Policía decidió trasladar a los menores primero al médico para una evaluación de su estado y luego al hogar de menores, con el fin de asegurar su bienestar y seguridad. Este procedimiento se llevó a cabo para garantizar que los niños estuvieran debidamente resguardados mientras se resolvía la situación familiar.
Finalmente, se localizó el domicilio de la abuela de los niños en la calle Lago Deseado, donde la madre se presentó minutos más tarde.
Manifestó que había dejado a los menores al cuidado de un familiar, quien se había retirado y los había dejado solos. Después de una breve investigación, se le entregaron los menores a su madre, quien fue citada para un posterior seguimiento por parte de las autoridades competentes.