El fútbol noruego fue protagonista de un hecho insólito recientemente, cuando el club Bryne FK, conocido por ser el equipo donde comenzó su carrera la estrella Erling Haaland, otorgó un premio inusual a su arquero Jan de Boer. En su debut en la liga noruega, Bryne FK cayó 1-0 ante el Bodo/Glimt, pero aun así decidieron homenajear al arquero por su destacada actuación.
Jan de Boer realizó varias paradas notables durante el partido, incluyendo la tapada de un penal en la segunda mitad, lo que le valió ser elegido como la figura del partido. Sin embargo, lo que realmente llamó la atención fue el premio que recibió: cuatro maples de huevos. Este premio es un reflejo de los fuertes vínculos del club con la comunidad agrícola local, que se centra en la producción de carne y productos lácteos.
El hecho de que un jugador reciba huevos como premio resulta llamativo en el mundo del fútbol internacional porque los reconocimientos suelen ser trofeos, dinero o artículos de lujo. No obstante, para el Bryne FK, este premio tiene un significado especial, ya que refleja su orgullo por sus raíces: “Somos agricultores y estamos orgullosos de ello”, suelen mostrar en carteles durante los partidos.
En el próximo partido contra Kristiansund, el jugador destacado del partido recibirá un premio diferente: cartones de leche local. Aunque el premio cambia, la esencia sigue siendo la misma: honrar a los jugadores con productos que reflejan la riqueza de la región. Este enfoque único del Bryne FK ha generado interés a nivel internacional, destacando la autenticidad y el compromiso del club con su comunidad.
Fuente: Diario Los Andes