Uno de los tres condenados que tuvo la denominada masacre de Panambí, ocurrida hace 11 años en la que mataron a casi toda una familia, falleció ayer tras más de un mes de internación como consecuencia de sufrir un ACV hemorrágico.
Fuentes oficiales del Servicio Penitenciario Provincial (SPP) confirmaron que Pablo Paz estaba internado en el SAMIC de Oberá desde el 1 de marzo de este año debido a una complicación de salud. Los últimos días tras ser intervenido por un ACV fueron difíciles y los atravesó conectado a un respirador artificial. La noticia se conoció ayer a primera hora.
Uno de los hechos más recordados en la provincia y de mayor impacto en la sociedad, se llevó la vida del maderero Oscar Carlos Knack (44), a su esposa Graciela Mojfiuk (42) y a dos de los tres hijos de la pareja, Bianca (12) y Cristian (25). Todos fueron golpeados, atados y quemados dentro de la vivienda familiar a la vera de la ruta provincial 5, kilómetro 7, durante el atardecer del 25 de mayo de 2014.
En el 2017, Marcial Alegre, Juan Ramón Godoy y Pablo Julio Paz, fueron condenados por el Tribunal Penal 1 de Oberá a prisión perpetua ya que consideró que las pruebas demostraron la autoría penalmente responsable de los imputados.
Para los jueces en su momento, la declaración de Cristian en plena agonía fue la columna vertebral del andamiaje probatorio. Y un año más tarde, pese a diferentes apelaciones, dichas condenas fueron ratificadas por instancias judiciales superiores.
Carlos “Nano” Knack, fue el único hijo de la familia que sobrevivió al ataque ya que esa tarde estaba en la casa de su novia. “Tienen que pagar acá en la tierra lo que hicieron” dijo tras las sentencias.