El escaso caudal del río Iguazú llegó a los 407 m3/s durante la noche del último martes en Cataratas, situándose como uno de los registros más bajos de los últimos veinte años, ofreciendo un espectáculo único, que posibilitan observar los grandes paredones de piedra desde los distintos circuitos que la conforman.
El caudal normal de las Cataratas es de1.500 m3/s y fue en abril 2020 que llegó a los 289 m3/s, según los antecedentes informados en su momento por Parques Nacionales, en plena época de la pandemia de Covid-19.
“Hay quienes dicen que el de esta semana fue el nivel más bajo de la historia del río Iguazú pero entendemos que no fue así. Más allá de los fríos números, lo cierto es que se trata de un espectáculo único, que pocas veces puede verse y que no sabemos cuándo puede volver a ocurrir”, indicaron trabajadores que cumplen funciones en el Área Cataratas.
En el mismo sentido, apuntaron que “la gente que nos está visitando en estos días queda maravillada porque las Cataratas nos muestran otra faceta y eso también está bueno. Por los reportes que tenemos, en los próximos días se iría dando un incremento del nivel del río Iguazú como consecuencia de las lluvias que están ocurriendo aguas arriba”.
Cabe recordar que en junio del 2021 la sequía por falta de lluvias mostró una imagen similar en las Cataratas. En aquel año el faltante de agua en los ríos obligó a las represas brasileñas -aguas arriba- a cerrar compuertas para mantener el líquido vital, dejando a los saltos apenas con unos hilos de agua.
En ese entonces se observaban pequeños arroyos y los inmensos muros de piedra que antes eran tapados casi en su totalidad por las aguas del río.
