TEHERÁN (AFP-NA). A un mes del comienzo del Mundial, una nueva polémica ha enrarecido las relaciones entre el seleccionador de Irán, el portugués Carlos Queiroz, y la federación; en esta ocasión el motivo ha sido la baja calidad del equipamiento deportivo.Después de una tardía concentración en Sudáfrica con un equipo incompleto y una larga negociación para la prolongación del contrato de Queiroz, ahora la federación iraní debe responder a la baja calidad de la ropa que lucirán los jugadores en Brasil 2014.En la víspera de iniciar el último tramo de preparación en Austria, Queiroz criticó abiertamente la ropa suministrada por el proveedor regional de la marca alemana Uhlsport.Según el portugués, “la ropa no estaba adaptada para jugar en condiciones de humedad extrema” como ocurrió en los “cruciales” choques ante Qatar y Corea del Sur de la fase de clasificación.Queiroz también bromeó sobre el tamaño de las botas, “de talla 34 para personas que calzan un 44”, y sobre la escasez de prendas, “al dar a cada jugador únicamente un abrigo”.Los jugadores también se han mostrado críticos con los equipajes que ha proporcionado la federación. “Nos han dado medias talla L. Dos días después y un lavado más tarde son talle S”, afirmó el delantero Karim Ansarifard, uno de los que estará en Belo Horizonte el 21 de junio, cuando enfrente a la Argentina.Otro atacante, Mohammad Reza Khalatbari, que utilizaba la misma marca deportiva en su antiguo club de Sepahan, asegura que los productos son diferentes.“Lo que tenemos ahora no sé lo que es. Cuando una cosa no sirve deberíamos admitir que hay un problema”, señaló.
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