SAN VICENTE. La mañana del sábado amaneció con un poco de niebla y el cielo cubierto. Un tipo de clima, por lo general, normal. Pero con los antecedentes del jueves por la tarde, nada parecía igual. Pero antes de la media mañana, el sol ya estaba a pleno sobre el barrio Malvinas Argentina y alumbraba el trabajo de vecinos y empleados de las empresas que acercaron su ayuda. Todos se apresuraban a trabajar para que la energía eléctrica volviera a las casas y poner nuevamente los techos a las viviendas que sufrieron al cruel tornado que los dejó a la intemperie.Un poco más distendidos, los damnificados por el tornado del barrio Malvinas Argentinas, comienzan a retomar su vida cotidiana. Electricidad de Misiones (Emsa) comenzó a trabajar en el barrio para restablecer la energía eléctrica y unas cinco empresas contratadas por el Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (Iprodha) empezaron a techar las casas dañadas. En el comité de crisis, el viernes por la noche, el titular de Emsa (distrito San Vicente), Pedro González, informó sobre el trabajo que se realizó después de la tormenta y los que se van a realizar en las próximas horas para restablecer la luz a todos los sanvicentinos. “Desde que el viento afectó el tendido eléctrico y dejó sin luz a toda San Vicente y la ciudad de El Soberbio, con nuestros operarios trabajamos en forma continua para restablecer la electricidad a las dos ciudades que se quedaron a oscuras la noche del jueves. Para las diez y media del viernes pudimos restablecer la luz a San Vicente. Para la noche ya teníamos reparadas las líneas que van a la toma de agua y la estación de rebombeo para que se restablezca el agua potable en la ciudad. Todavía nos quedan algunas colonias donde hay postes caídos y barrios más alejados. En ellos estaremos trabajando durante el fin de semana”, aseguró González.La intención era que, para el sábado, los vecinos del barrio Malvinas que se vieron menos afectados tengan energía eléctrica, “En el resto del barrio, que fue el más damnificado, vamos a trabajar para brindarle luz lo antes posible. En ese sector vamos a tener que hacer prácticamente el tendido completo de poner los postes de nuevo porque están casi todos caídos o quebrados”, indicó y agregó que “pudimos trabajar rápido porque recurrimos y convocamos a los trabajadores de Emsa de otros distritos que vinieron a darnos una mano. Vinieron de El Soberbio, San Pedro y otras ciudades cercanas. Los postes caídos y dañados son incontables y están distribuidos por toda la ciudad y la colonia. Como nos pidieron, le dimos prioridad a la ciudad de San Vicente y El Soberbio y luego la línea que va a la toma de agua potable”, señaló González.“Los cables pretensados se dañaron con las chapas o se rompieron en la zona donde agarró más fuerte el temporal”, subrayó González e indicó que “eso implica tener que cambiar casi toda la línea de cables. Para el lunes queremos tenerlo listo y restablecida la electricidad en la zona del Parque Industrial, para que las empresas puedan trabajar normalmente”. A trabajar en las viviendasDesde el Iprodha implementaron un sistema de trabajo con las distintas empresas que prestan servicio a esa entidad del Estado. Hay por lo menos catorce empresas con sus operarios que comenzaron a trabajar en la reconstrucción de las casas. Se priorizó arreglar los techos de las viviendas para prevenir en caso de que vuelva a llover en los próximos días. De esa manera, en caso de que esto ocurra, los ciudadanos tendrán un lugar seco para estar con sus familias.Cinco empresas se dedicaron a reparar los techos y uno de los responsables del Iprodha detalló en la reunión del Comité de Crisis el viernes por la noche que “se van a reparar los techos de los cuerpos de las casas. Las ampliaciones no están dentro de las planificaciones y órdenes que tenemos para hacer los trabajos”. Según aseguraron desde esa entidad, se van a hacer los estudios indicados en las estructuras de las casas para evaluar si es necesario hacer una nueva vivienda o no.Según trascendió en forma extraoficial, desde el Iprodha impartieron la orden de techar y reparar los rasgos que más se ven en las casas. Pero las empresas que están trabajando no quieren hacerse responsables por los daños estructurales y que, en un futuro, se pongan en peligro a los habitantes de las viviendas. Serían por lo menos nueve casas las que no están en condiciones de ser habitadas por los daños que tienen. En ese caso, se tendrán que reubicar a las familias y reconstruir las casas.Desde el Comité de Crisis se pidió que se atienda de la mejor manera a los damnificados por el temporal. La orden es no dejar pasar a nadie sin atender. El Ministro de Bienestar Social de la Provincia, Joaquín Losada fue muy claro con los demás integrantes del Comité: “no tiene que quedar ni uno sin atención. No hay que mezquinarle nada y es preferible que se les dé demás y no que después se quejen. Si hace falta más colchones, frazadas, víveres o agua, pidan y vamos a gestionar más desde Posadas”. Con la intención de evitar a los “avivados” de siempre, las atenciones se realizan en los domicilios. No se programó un lugar donde los damnificados vayan a anotarse o a pedir cosas. Daños en otros barriosEn los barrios del Iprodha que fueron dañados, no hace falta mucho control porque las familias ya están identificadas. “En el barrio Mujeres Sanvicentinas hay ocho y están identificadas. Quiero que se preste mucha atención a los que están afuera de estos dos barrios. Según el informe que hicieron desde el municipio y las instituciones de seguridad y de la provincia que están trabajando, censaron a unas cincuenta familias que están identificadas y ubicadas en un plano. Pueden haber unas cinco más que no se las ubicó y espero que para el domingo los estén. Vamos a tratar de evitar los avivados que aprovechan la situación para pedir cosas. Para eso tenemos que estar bien preparados y organizados entre todos”, señaló Losadas.En total, son ciento sesenta y cinco casa dañadas en el barrio Malvinas Argentinas. Son ocho las manzanas que fueron más perjudicadas y otras cinco casas de otras manzanas que fueron afectadas pero con poco daño. Ocho son las viviendas en el barrio Mujeres Sanvicentinas y en los alrededores de estos: las colonias adonde agarró el tornado y los barrios 25 de Mayo y kilómetro 48 y Alemán, allí unas cincuenta casas que pueden subir hasta cinco más. Esos son los datos que manejaban el viernes en el comité de crisis. Las más perjudicadas fueron las que estaban afuera de los barrios del Iprodha donde quedar
on destruidas por lo menos diez. En este caso, serán atendidas a la medida de los daños que tuvieron: techo o reconstrucción de la vivienda. En el caso de las que fueron totalmente destruidas, se les va a armar una casa de emergencia de madera para que tengan un lugar donde ubicarse.
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