“Este año la labor de los bomberos estuvo al pie de las necesidades en diferentes situaciones, quizás más expuestos, pero para ello nos capacitamos. Hay que adaptarse a los distintos requerimientos, incendios, temporales, provisión de agua, accidentes de tránsito, para lo cual la estructura provincial de bomberos voluntarios se ha capacitado", comenzó explicando el titular de la Federación Misionera de Bomberos Voluntarios, Waldemar Laumann.Acontecimientos recientes, como el incendio en el supermercado El Cóndor, de Oberá, la tormenta que afectó a gran parte de Puerto Iguazú, la asistencia en El Soberbio ante la carencia de agua potable que duró varios días, son solamente pequeños ejemplos de las innumerables intervenciones de los bomberos y a los que Laumann no esquiva a la hora del análisis."A lo sucedido en Oberá podemos decir que nadie puede tener en el momento diez camiones cisternas, diez autobombas ni cien bomberos. Son situaciones que surgen pero que tienen que ver con la seguridad. En este tipo de circunstancias hay que tener en cuenta la seguridad propia, interna de cada uno (empresa, institución), donde hay que estar con personal entrenado y preparado para actuar dada una necesidad así. Ese día, por ejemplo, todo el personal de El Cóndor estaba trabajando. Hay que ver si existía una red de incendio, si había provisión de agua porque a veces hay instalaciones de red de incendio pero la reserva hídrica no alcanza para satisfacer", resaltó el presidente de la Federación, que tiene su base en Montecarlo.¿Los municipios deberían darle mayor participación a los bomberos para instalar las bocas hídricas?En primer lugar es necesario que los bomberos de cada ciudad o localidad conozcan las distintas bocas de recurso hídricos existentes para abastecer las autobombas en caso de incendios de gran magnitud. Por lo general se instalan 40 a 50 bocas de incendio en cada ciudad, de las cuales funcionan solamente dos o tres y al resto no les llega ni una sola gota de agua. Ese es un problema gravísimo que existe.¿Los bomberos no son valorados actualmente?Hay una realidad, hasta hace muy poco tiempo a los bomberos voluntarios no se les daba mucha importancia, era algo que no le interesaba ni a los funcionarios ni a nadie, éramos personas que solamente hacíamos esto por voluntariado. Sin embargo hemos demostrado que con capacitación, perseverancia, trabajando seriamente y con transparencia, buscando las distintas alternativas para capacitarnos en el empleo necesario, somos una herramienta clave en la sociedad. Ahora estamos comprando elementos de lucha contra incendio y de protección personal todo bajo normas NFPA (National Fire Protection Association, la principal fuente mundial para el desarrollo y diseminación de conocimiento sobre seguridad contra incendios y de vida). Es necesario que tengamos órganos de contralor que certifiquen que las herramientas que se utilizan para el combate de incendio sean equipos normatizados y que nos brinden una garantía de trabajo, más allá de la capacitación que tiene que tener el bombero.¿Hay nuevos elementos o estrategias para utilizarla contra el fuego?El avance es permanente. Por ejemplo, hoy en día tenemos las "lanzas" que antes eran de chorro pleno y ahora lo son reguladoras de chorro niebla, reguladora de caudal, se puede utilizar el agua necesaria para generar el chorro de vapor adecuado a la demanda de cada caso. No es el agua en forma directa el que apaga el incendio sino la generación de vapor donde hay alta temperatura, que es lo que sofoca el fuego. Hoy se apaga un incendio por sofocación y no por inundación. Antes se tiraba agua que brotaba por todos lados y hacíamos más daños con el agua que otra cosa. Todas esas son técnicas a nivel mundial, que las vamos aprendiendo e incorporando, fundamentalmente son normativas europeas. Además, vamos capacitando a la gente de acuerdo a las necesidades de nuestra zona, no es lo mismo Misiones que Corrientes, Entre Ríos, Santa Cruz, La Pampa o Mendoza. Tampoco Montecarlo tiene las mismas necesidades que Oberá, Iguazú o San Antonio sino que todos tienen problemática distinta por la topografía, algunos tienen más partes vegetales combustible. Son cosas que hay que tener muy en cuenta tanto para la capacitación del personal como de los elementos a utilizarse. La deforestación y reforestación juegan un papel muy importante. En época de sequía generan combustible vegetal… todas esas cosas hay que tenerlo en cuenta.¿Con el cambio climático hay más intervenciones?Hay sectores o ciudades, o departamentos en los cuales ha decrecido nuestras intervenciones y en ello mucho tienen que ver las campañas de concientización que se llevan adelante sobre la temática, principalmente en las escuelas, a través de los medios escritos, radiales y televisivos. Todo ayuda para que se vayan minimizando situaciones y eso se refleja en nuestras intervenciones. Hoy ya no hay más grandes incendios y también en eso es clave la intervención inmediata, es una suma de factores. La gente tomó más conciencia que por ejemplo, la quema particular no se utiliza como una herramienta de limpieza sino que se vuelven a reutilizar los desperdicios como abono orgánico y eso fue ayudando. Lo que sí ha crecido muchísimo es el tema de los accidentes de tránsito. Años atrás teníamos que cada diez salidas ocho eran por incendios y dos por accidentes, ahora eso se invirtió y debemos intervenir en esa misma proporción en accidentes. Debido a esto tuvimos que prepararnos para contrarrestar esa situación con asistencia, unidades de rescate vehicular que tienen sus costos que conllevan a eso. Hay que seguir trabajando en la prevención, por sobre todas las cosas, y que los cuarteles se vayan equipando, las comunidades están colaborando con eso, con recursos, para que funcionen adecuadamente.Mil bomberos"Tenemos 1.000 bomberos voluntarios, entre hombres y mujeres. Además son 32 las asociaciones que componen la Federación Misionera de Bomberos Voluntarios que el año próximo cumplirá 35 años", indicó Laumann.Existe una escuela provincial de bomberos voluntarios que funciona hace diez años, "donde arrancamos de cero y hoy es una de las mejores estructura formada a nivel nacional, en igualdad de condiciones con cada federación del país por la calidad y cantidad de instructores que fueron a perfeccionarse a Estados unidos, Europa, Chile, entre otros lugares. Cada asociación tiene la obligación de tener una escuela para jóvenes entre 12 a 17 años, de cadetes para que cuando lleguen a los 18 años estén preparados y eso nos está dando buenos resultados".
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