La institución de la fecha implica un rescate o resignificación del acto institucional, pero también una revalorización de los contenidos de la primera carta magna, frustrada en su momento por el golpe militar de 1955, y, posteriormente, sustituida por la sanción de la Constitución vigente, sancionada en abril de 1988, en un marco de democracia condicionada por la proscripción de la fuerza política mayoritaria. El rescate que se ha hecho desde la Legislatura del significado histórico de la carta magna inicial llevó también a la creación en el mismo Parlamento provincial de la "Sala de las Dos Constituciones", iniciativa en la que se percibe la intención de gestar una reflexión crítica sobre el pasado institucional de la provincia, y su realidad presente.La sanción de leyes como la que nos ocupa, que buscan dar raigambre institucional a una mirada de recuperación de la historia misionera, cobra su real sentido únicamente si la sociedad en general se pronuncia al respecto, para lo cual sería de esperar un mayor involucramiento de personas e instituciones vinculadas a los estudios culturales e históricos.Al señalarse la existencia de dos momentos diferenciados en la historia institucional misionera, vertebrados por un proceso político nacional complejo y contradictorio, se plantea en forma implícita a Misiones como provincia joven, y en muchos sentidos todavía en crecimiento y búsqueda de una identidad definitiva.Tarde o temprano, si no se quiere que la legislación sea letra muerta, le tocará a la sociedad en su conjunto hacer suyo el desafío de reflexionar sobre la herencia del pasado histórico. Y de esa manera desentrañar el significado, todavía enigmático para la mayoría, del "Día del provinciano misionero".
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