Nutrición profunda

Los cambios en la piel del rostro a los 35 años ya son considerados como envejecimiento facial. Falta de luminosidad, líneas de expresión, manchas, sequedad, poros visibles, evidencian el envejecimiento.A medida que pasan los años, el colágeno y la elastina se van perdiendo. Las fibras que sostienen la piel se debilitan, pero te recuerdo amiga que cuando aparecen las arrugas no sólo se deben a los años transcurridos sino también a la cantidad de exposición solar que hayas tenido. También influyen lógicamente la herencia familiar, el tabaco, el alcohol.La piel tiene una textura no uniforme porque con el paso de los años se vuelve más frágil, más fina y pierde su aspecto uniforme, al igual que la pigmentación, la producción de pigmentos disminuye y por esta razón la pigmentación de la piel se vuelve desigual y si observamos nuestra piel a partir de los 40 nos daremos cuenta que está opaca. Esto se debe a la disminución de la actividad hormonal. Otro signo visible de nuestro paso por la vida son los poros dilatados.Las manchas de la edad aparecen como oscuras sobre la piel. Esto es una consecuencia de la exposición solar acumulada durante toda la vida, son inestéticas y aparecen después de los 40. Otro  síntoma que no nos beneficia es la sequedad y la tirantez de la piel porque se deshidrata y se arruga.La suavidad está relacionada con la presencia del agua, de allí nuestra insistencia en beber abundante agua, entonces para proteger a la piel, la glándula sebácea produce una sustancia llamada sebo que sería una mezcla de ácidos grasos y cera, que forman una barrera de protección, pero con los años decrece la producción de sebo y la piel se vuelve opaca.Amiga este proceso arranca a partir de los 25 en forma lenta y gradual. Sumado a esto, entre los 40 y 50 comienza la disminución de estrógenos, por eso este proceso natural debes tomarlo con cuidado.Colabora: Elena Cacerez EchevarríaEn [email protected]