Ese día Nahuel se reunió con la yaguareté Tobuna, en cuarentena desde mayo de 2015, a fin de intentar crear una cuarta población de esta especie autóctona de la región. Según estimaciones científicas, sólo quedan unos 200 ejemplares de yaguaretés en el país, por lo que es declarado Monumento Natural Nacional y en serio peligro de extinción. Nahuel, viajó desde Río Negro hasta la Isla San Alonso en los Esteros del Iberá (Corrientes) donde se encontró con Tobuna, la felina que llegó hace casi un año al lugar para reintroducir la especie luego de 50 años de extinción en la zona. Su llegada implica la concreción del proyecto con el que Ferrero colabora a través de la marca Kinder Natoons, y que buscará reinsertar a los yaguaretés en su hábitat natural.
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