El impacto del “tarifazo” de energía eléctrica en Misiones y la bronca consecuente no son menores, pero los funcionarios de la empresa Electricidad de Misiones SA (Emsa) todavía no acusaron recibo. Harto de esperar alguna señal desde el poder para corregir los excesos en las facturas, el propietario de una sala de teatro de la capital decidió prohibirles la entrada a los directivos de la distribuidora y a los legisladores misioneros “hasta tanto realicen gestiones efectivas para regularizar la situación de abuso a la que fueron sometidos los usuarios de la provincia” tras la aplicación de un nuevo cuadro tarifario que elevó el costo del servicio hasta en un 300%, con facturas residenciales que promedian los mil pesos y boletas de comercios e industrias con montos “impagables”. Buki Rosa, dueño de la popular sala Mandové, hizo pública en la red social Facebook la decisión tomada que puede parecer controversial y que sin embargo, tuvo el inmediato apoyo de cientos de usuarios de la misma red. Quienes compartieron la idea incluso sugirieron un repudio similar y masivo en otros puntos públicos de la ciudad, incluidos restaurantes y negocios. De esta manera, propusieron imitar el reproche social que ya se efectivizó en Asunción (Paraguay) cuando comercios de todos los rubros y hasta hinchadas de clubes de fútbol se sumaron a la campaña de repudio contra los legisladores que impidieron el desafuero del senador Victor Bogado, acusado en un resonado caso de corrupción. Una medida fuerteEn noviembre de 2013 los dueños de restaurantes, shoppings y hasta salas de cine de Asunción declararon “persona no grata” a los 23 parlamentarios que actuaron en protección de su par. Jian Picollo, gerente general del shopping Villa Morra de Asunción, anunció que los guardias del centro comercial tenían identificados a los cuestionados parlamentarios para no dejarlos ingresar al recinto.Se sumaron al repudio social los shoppings Mariscal López, Mariano y Del Sol. Las principales salas de cine del país asimismo se reservaron el derecho de no admisión. “No son bienvenidos en nuestras salas de cine. No hay películas ni pororó para ustedes”, rezaba un anuncio oficial en las redes sociales difundido por los cines Itaú del Hiperseis, Del Pinedo Shopping y Villamorra Cinecenter.
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