A simple vista, difícilmente alguien pueda suponer que don Leonzo Goncalvez ya tiene 100 años. Vital, inquieto y de buen humor, sigue en la chacra, activo como siempre.Don Leonzo reside hace aproximadamente 78 años en Villa Bonita, municipio de Campo Ramón, donde crió a sus seis hijos y es un vecino querido y respetado por todos. Además, es famoso en la zona por el exquisito vino criollo que fabrica, hoy junto a sus hijos, con la uva que cultiva hace casi siete décadas. Sus años de juventud los vivió en Colonia Mártires, sitio que acogió a su padre, un inmigrante portugués que llegó al país a comienzos del siglo pasado, don Manuel Batista Goncalvez. “Mi papá bajó del barco con 20 centavos. Vino a buscar el pan y lo encontró, por eso siempre decía que quería más a la Argentina”, afirmó don Leonzo. Manuel, su padre, llegó al país entre los años 1910 y 1912 empujado por la pobreza y la crisis general que se vivía en el viejo continente. Llegó a Misiones seducido por la prometedora industria yerbatera. La mudanza trajo consigo buenos resultados, al punto que la primera cosecha de yerba mate ascendió a 800 kilos. Don Leonzo rememoró esos días: “Llevó la yerba a Santa Ana y le pagaron 70 centavos el kilo, de aquel entonces, si me acuerdo que en esa época con un peso comprábamos cinco kilos de carne”. En aquel entonces, los pocos habitantes que había en el lugar vivían de la caza y de la pesca que en aquellos tiempos abundaban. Producto del trabajo y el sacrificio constante, la economía de la familia Goncalvez fue progresando y hasta se dieron el lujo, en los años 20, de tener un automóvil. El padre de Leonzo compró un Ford T y fue el segundo que hubo en Mártires y recordó también que incluso con el mismo auto viajaron a lo que hoy es Oberá, para la colocación de la piedra fundamental en 1927, un año antes de la fundación oficial de Oberá, a ese acto concurrió el Gobernador Barreyro. Ya con 25 años, don Leonzo se radicó en Villa Bonita, Campo Ramón, donde compró una chacra por la suma de 1000 pesos, que le dio su padre. Trabajó la tierra, plantó parrales, yerba mate, tuvo una vida próspera, se casó a los 28 años con doña Mercedes Jhort, tuvieron seis hijos varones, actualmente tiene 16 nietos y 19 bisnietos.Este lunes festeja su cumpleaños número 100 junto a sus hijos, nietos, bisnietos, sobrinos, amigos y demás familiares en su casa de Villa Bonita.
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