Ante las versiones que daban cuenta de la <a href="http://www.primeraedicion.com.ar/nota/212388/eby-afinan-remate-de-autos-de-alta-gama-y-los-%26ldquo%3Bcontratados.html">existencia de más de un centenar de “ñoquis” a los que no se les habría renovado la relación contractual con el Entidad Binacional Yacyretá (EBY)</a>, hubo un fuerte reclamo de los lectores de este diario pidiendo saber los nombres de quienes percibieron por largo tiempo un sueldo del Estado nacional sin realizar tarea alguna.Fue así, que el presidente de PRIMERA EDICIÓN, Francisco José Wipplinger, remitió el 23 de febrero una primera nota al director Ejecutivo de la EBY por Argentina, el misionero Humberto Schiavoni, pidiendo conocer el listado de los “ñoquis”, monto de dinero percibido, si alguno lo había devuelto y si Yacyretá inició causa alguna ante la Justicia por esta cuestión.El 16 de marzo y el 25 de abril el asesor Legal de Schiavoni, Alejandro Tonelli, remitió dos contestaciones que no pasaron de la formalidad y advirtiendo frenos legales para poder cumplir con la solicitud.Este martes, Wipplinger ratificó por nota la solicitud de la nómina de “ñoquis”, asegurando que “los misioneros, que tanto hemos padecido la llegada de Yacyretá, merecemos saber si la anterior administración de 12 años mantenía ‘ñoquis’ con los recursos no sólo aportados en impuestos por parte de los contribuyentes de Misiones o Corrientes, sino de todos los argentinos. Si bien se mencionó en entrevistas periodísticas que un centenar de personas fueron dadas de baja por la EBY, se multiplican las versiones que indican la reincorporación de las mismas en su gestión”.“Por ello, no conforme con lo argumentado por el doctor Tonelli, es que insisto en mi solicitud de acceso a la información pública de la Entidad Binacional Yacyretá para conocer: 1) La cantidad de “ñoquis” existentes al momento de hacerse cargo Usted de la Dirección Ejecutiva por la Nación Argentina en la margen que corresponde a su administración en todas las sedes administrativas y técnicas; 2) Haberes que percibía cada uno (no solo su básico por categoría sino incluyendo adicionales o cualquier otro adicional). 3) Si en su totalidad o en parte fueron dados de baja (en sus contratos o en la planta de la EBY por diferentes mecanismos administrativos-legales) y fecha de baja de cada uno. 4) Cuántos de estos volvieron a ser contratados o incorporados a la planta de la EBY en cualquiera de sus sedes (fecha de reincorporación), motivos de la re contratación en cada caso particular, monto a percibir por mes de cada uno y función asignada a partir de la reincorporación a cada uno. 5) Cantidad de asesores contratados por la actual administración que Usted dirige, monto de haber mensual y tarea asignada”, puntualizó en el requerimiento ciudadano.Finalmente, Francisco Wipplinger afirmó que “el listado de estos “ñoquis” debe ser de público conocimiento, ya que cualquier ciudadano que se sienta afectado por esta irregularidad, podría iniciar las acciones legales que considere necesarias con el fin de que exista una sanción (no sólo la social) y la consecuente devolución de los fondos percibidos irregularmente. Ello no puede ocurrir si su administración, Señor Director Ejecutivo, no transparenta los datos”.Schiavoni, esta vez, ¿responderá a los pedidos de información?
Discussion about this post