El profesor José Alberto Fernández realizó una muestra colectiva denominada “Taller de Arte Coê-ti (amanecer), donde se expusieron los trabajos de sus alumnos y se realizó un breve recorrido de su vida a través del arte. La muestra se expuso en el Museo de Bellas Artes Braulio Areco y contó con la presencia de autoridades de la comuna pero, uno de los grandes protagonistas en la denominada “Velada en el Museo”, en el marco del día internacional de los museos que se realizó el pasado jueves, fue Fernández. La velada también contó con Body Painting a cargo de los artistas Claudia Olefnik y Juan Carlos Nuñes. Ambos pintaron en vivo a las modelos Susana Enríquez y Andrea Gutiérrez, quienes lucieron diversos dibujos sobre su cuerpo que se mimetizaron con un cuadro de paisajes misioneros, realizado por el atelier de Monarcas. Fernández es oriundo de la localidad correntina de Alvear, pero desde adolescente vivió en Misiones donde se recibió de profesor en el Instituto Montoya. “Cuando me recibí ya tenía trabajo y trabajé durante 35 años en diferentes colegios”, contó a PRIMERA EDICIÓN. En la muestra se pudieron apreciar piezas de cerámica, esculturas en metales, fotografías y cuadros que describen distintos paisajes de la provincia, como también la historia de Posadas. Estos trabajos se realizaron con distintas técnicas que van desde óleos, temperas y dibujos en lápiz, incluso cajas con incrustaciones brillantes decoradas al estilo carioca. Además, trabajos realizados en baldosas donde se utilizaron técnicas de geometría y matemática para describir en réplicas exactas los diseños que formaban parte de los pisos de la capilla de Santa Ana (Corrientes) y la Casa de Gobierno de Misiones.En la muestra se pudieron observar varias obras que referían exclusivamente a miradas. “Los visitantes me preguntan ¿por qué tantas miradas? Y les respondo ‘porque la mirada es la forma de penetrar en el alma’”, reveló Fernández. En un extremo de la galería se encontraba una amplia tela con distintos objetos, que el artista bautizó como “Lo que Yacyretá nos dejó”. “Cuando la represa comenzó a soltar agua, me fui a caminar por la orilla y comencé a recoger lo que quedó: peines, aros, anteojos y un plato de lata enlozado de origen paraguayo” comentó. En la exposición se pudieron apreciar las obras de varios artistas que estudian en su taller. Al respecto, Fernández contó: “Tengo alumnas que se desempeñan en distintos oficios como: doctora en bioquímica, ingenieras, profesoras y amas de casa”, quienes encuentran en el arte un estilo de vida. “El arte cura las enfermedades de la cabeza, porque uno aplica la locura en la pintura, es por eso que amo el arte y seguiré trabajando hasta el final de mi vida”, afirmó.Fotos: Gentileza R.Saucedo
Discussion about this post