Néstor Fabián Monzón (47), conocido como el “padre Néstor” en Reconquista, donde enfrenta una acusación por abusar a dos niños de tres y cuatro años, podría cumplir prisión domiciliaria en la casa del Obispado posadeño, donde actualmente reside el titular de esa entidad, el clérigo Rubén Martínez.Así se desprende del polémico pedido realizado por la defensa del acusado, quien días atrás solicitó a la Justicia de Santa Fe que su defendido cumpla con el arresto que le impusieron las autoridades en dicha vivienda, emplazada a metros de la avenida costanera de Posadas.La información, publicada el viernes por el sitio web “Reconquista Hoy”, fue confirmada a PRIMERA EDICIÓN por el abogado Andrés Damseller, a cargo de la querella. “Esa cuestión ha sido solicitada por la defensa y se va a tratar el próximo lunes”, explicó el letrado. Monzón actualmente se encuentra alojado en una celda de la comisaría de Avellaneda, distante a apenas cinco kilómetros de Reconquista. No obstante, la defensa del padre Néstor planteó la posibilidad de que continúe el encierro bajo prisión domiciliaria en la vivienda del Obispado posadeño, actual morada de Martínez, quien defendió públicamente la inocencia del acusado.No se trata de la primera vez que la defensa del Padre Néstor realiza un pedido así. En abril pasado había solicitado cumplir prisión domiciliaria en una abadía entrerriana, pero los propios responsables del lugar rechazaron el planteo de lleno (ver “Antecedente y…”).Será el magistrado Gonzalo Basualdo, juez de Primera Instancia de Santa Fe, quien deberá resolver la cuestión en una audiencia fijada para el próximo lunes. Desde ya, la situación genera polémica tanto en Reconquista -donde la ciudad está dividida- como en Posadas.De Posadas a ReconquistaMonzón fue detenido por primera vez el 19 de abril y acusado por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por su condición de sacerdote”. En el caso tomó intervención el fiscal de Reconquista, Rubén Martínez, que casualmente comparte nombre y apellido con el obispo de Posadas. Ese sería, luego, el único punto en común entre ambos.“Se confirmó que la niña tiene desgarro parcial de himen y fue contagiada con el Virus del Papiloma Humano (VPH), una enfermedad de transmisión sexual”, explicó el representante del Ministerio Público Fiscal a la agencia Télam.En principio, la Justicia ordenó la prisión preventiva de Monzón, quien luego de casi dos meses en la comisaría de Avellaneda, a pocos kilómetros de Reconquista, recuperó la libertad con restricciones. Sin embargo, días después el padre Néstor recibió una nueva denuncia en su contra por parte de los padres de un niño de cuatro años que también contó que habría sido obligado a manosearlo, razón por la que nuevamente fue detenido.Tras esa segunda denuncia es que el obispo posadeño Rubén Martínez, exprelado de Reconquista y amigo de Monzón, viajó hacia aquella localidad y -según una posterior denuncia del fiscal- amedrentó al agente del Ministerio Público.“No es una denuncia cualquiera. Si se comprueba, las penas son importantes, ya que la coacción es una amenaza agravada. Es un delito de instrucción, es un delito importante”, resaltó Eladio García, fiscal general de Santa?Fe al respecto. En aquel viaje, el obispo posadeño defendió a Monzón. “Vengo para acompañarlo, es alguien con quien tengo una gran cercanía, lo conozco desde hace años. Vengo a manifestar la absoluta certeza de su inocencia”, dijo a los medios de aquella provincia.Esas declaraciones contrastan con la carta que familiares de las víctimas aseguran haber recibido del propio papa Francisco, “donde felicitaba expresamente a la mamá de la nena por su valentía”, según confirmó el propio Eladio García.Antecedente y rechazoNo es la primera vez que la defensa de Monzón pide que el cura cumpla domiciliaria en una sede de la Iglesia. Como el diario La?Nación publicó el 27 de abril, se había hecho una solicitud similar a la Abadía Benedictina del Niño Dios, en Victoria, al sur de Entre Ríos.“El cura Monzón no ha estado, no está, ni va a estar en la abadía. La comunidad no está en condiciones de recibir a un sacerdote en esta situación”, fue la respuesta a través de un comunicado de la mencionada entidad religiosa. Así, los benedictinos quedaron al margen del espinoso asunto y de una polémica que parece continuar, ahora en Posadas.
Discussion about this post