“Hasta acá llegamos, ya hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance, nos sentimos defraudados por la Justicia. El STJ no respetó un juicio impecable donde hubo dos condenados por matar”. Mauricio Mercol, padre del joven muerto a golpes en marzo de 2006, habló con PRIMERA EDICIÓN, volvió a manifestarse sereno, no pierde la tonada cordobesa, estira las vocales, pero para ratificar la lucha de su familia por Iván.“Ya pasaron más de diez años del homicidio, en el medio cuatro suspensiones injustificadas de debate que casi empujan todo a la prescripción. Si no intervenía la ayuda de la fiscal Liliana Picazo no íbamos a tener juicio. Después soportamos dos años más para que el Superior se expida sobre las apelaciones de la sentencia y que falle de esta manera, ya no podemos hacer más, todas las pruebas se debatieron, y ahora de una condena de prisión efectiva pasamos a tres años en suspenso. El trato de la Justicia con nosotros es de carcajada”.En cuanto a la orden de que Ruiz y Cantallops cumplan tareas comunitarias durante un año, manifestó: “No creo en absoluto que les sirva de algo. Ruiz por ejemplo, ni siquiera se arrepintió por lo que hizo, hasta en el juicio se mostró arrogante, lo único que le interesó fue su libertad, no ir a la cárcel”. “De todos modos la culpa no se la saca nadie, aunque sea con una sentencia liviana como esta, en su conciencia sabe cada uno que mataron cobardemente, quedó demostrado en el juicio”.
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